viernes. 10.05.2024

En la anterior entrega de 'Finanzas al día' traté la importancia de aprender a proteger nuestras posesiones como paso previo a empezar a pensar en acumular nuevos activos. En esta nueva entrega vamos a abordar la que sin duda es la característica principal de un buen ahorrador, la virtud sobre la que va a pivotar la salud de nuestras futuras finanzas y sobre la que la mayoría de los inversores de éxito han construido sus fortunas. Estamos hablando de la previsión y la capacidad de anticipar acontecimientos futuros a través de acciones presentes.

A lo largo de mis artículos suelo utilizar referencias a reconocidas personalidades del pasado y presente. Los refranes y frases célebres son en sí una fuente de sabiduría si se saben interpretar, así que abriré esta entrega con Henry Ford: “Antes de nada, estar preparado es el secreto del éxito”.

Efectivamente, estar preparado lo es todo, especialmente en los tiempos en los que vivimos y dada nuestra condición de expatriados, donde cualquier cosa puede cambiar de la noche a la mañana. Un ejemplo de previsión sería la protección personal a través de un seguro de vida o de enfermedad.

Afortunadamente el grado de desprotección en este apartado no es total dado que muchos de los empleadores contribuyen con un seguro de vida y/o enfermedad. Sin embargo hay que tener cuidado porque puede encerrar trampas. Algunos de estos seguros solo tienen cobertura si el accidente se produce relacionado con la actividad laboral (dentro del recinto de trabajo o en horas de oficina por ejemplo). Asimismo en muchos casos la cobertura que ofrecen es limitada en cuanto a cantidad y objeto del seguro.

En este sentido las demandas de alguien con familia dependiente no pueden ser las mismas que las de una persona soltera en cuanto a cantidad a percibir por el beneficiario. No es raro encontrar seguros que en caso de fallecimiento o enfermedad grave del padre de familia dejarían a los supervivientes en clara situación de desprotección o debilidad financiera, ni lo es encontrar tratamientos no cubiertos por los seguros de empresa (especialmente las denominadas enfermedades críticas como cáncer, ataques al corazón… etc). Sin embargo el principal peligro estriba en un eventual cambio de trabajo.

Al cambiar de empleador el seguro automáticamente cesa y estaremos expuestos a que nuestro nuevo empleador ofrezca en las condiciones de contratación un seguro que se adapte a nuestras necesidades. El consejo respecto a este punto es conseguir un seguro privado que vaya con nosotros aunque nos cambiemos de trabajo o país en un futuro, adaptado a nuestras necesidades y las de nuestra familia.

Entre los clientes de mi compañía contamos por desgracia con ejemplos concretos en este sentido que a pesar de invertir su dinero dejaron aparcada la contratación de un seguro privado. Un manager de una empresa de construcción falleció este mismo año dejando mujer y dos hijos que recibieron una suma cercana a 1 millón de Dirhams como seguro de empresa y se ven ahora forzados a vender su casa para hacer frente a los gastos del día a día dado que la suma era insuficiente, siendo la mujer del fallecido madre desempleada. Es probablemente difícil pensar que esto nos pueda pasar pero teniendo en cuenta que el precio al que se consigue un seguro de estas características es bastante económico e incluso que se puede especificar que éste no se incremente durante toda la vida del seguro, parecería razonable pararse a pensarlo dos veces. Sin duda este es solo una vertiente de las ventajas de contar con una buena previsión en nuestras finanzas.

En el apartado ahorrador e inversor existen numerosas herramientas de previsión y planificación que pueden marcar la diferencia entre afrontar el futuro de la manera que imaginamos y deseamos frente a unas finanzas desestructuradas que pueden llevar a improvisar, a menudo con resultados diferentes a lo que hubiéramos querido. De todas ellas hablaremos en futuras entregas de “Finanzas al día”.

Ángel Lemos, experto financiero, MBA por el Instituto de Empresa y consultor y asesor para expatriados.

Acaba este artículo de la manera que empezó, con otra referencia: “Es mucho mejor prever, incluso sin certeza, que no prever en absoluto” (H. Poincaré). Estaré encantado de atender todas las consultas a partir de ahora y ayudarte a conseguir sus metas tanto si piensas seguir expatriado como si tu objetivo final es volver a tu país.

———————————————————–

Para cualquier consulta concreta o asesoramiento directo puede dirigirse a Ángel Lemos, experto financiero, MBA por el Instituto de Empresa y consultor y asesor para expatriados que atesora larga experiencia y excelentes resultados en Emiratos Árabes Unidos. Correo electrónico de contacto: [email protected]; teléfono: +971 55 2424 590; web: www.lime-financial.com.

Claves para blindar la solvencia económica de la familia en Emiratos Árabes