Emiratos Árabes Unidos ha anunciado su pleno apoyo a los esfuerzos internacionales para combatir el terrorismo del Estado Islámico en Irak y en Levante (ISIL) ya que considera que tal "guerra" no va a provocar una marginación de los musulmanes sunitas, no dará lugar a un desmembramiento de los componentes del pueblo de Irak y no acarreará la intervención de potencias extranjeras, según informa la agencia WAM.
En un discurso ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, el ministro de Relaciones Exteriores de Emiratos Árabes Unidos, HH Sheikh Abdullah bin Zayed Al Nahyan, afirmó que "la seguridad de Irak es una parte integral de la seguridad de la región en su conjunto".
La reunión del Consejo de Seguridad, que se celebró a nivel de ministros, fue presidida por el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, y contó con la presencia del ministro de Relaciones Exteriores de Irak así como de los cancilleres de otros 35 países.
Tras expresar su satisfacción por la celebración de la reunión, el jeque Abdullah dijo que se estaba celebrando en un momento crítico, cuando hay necesidad de una respuesta urgente y es imprescindible la coordinación de los esfuerzos internacionales para hacer frente al peligro que representa ISIL.
Agregó que Emiratos Árabes Unidos se opone "a aquellos que intentan perturbar la seguridad y estabilidad de Irak". Hizo hincapié en el apoyo de Emiratos Árabes Unidos a los esfuerzos internacionales para hacer frente al terrorismo del ISIL tal como se ha señalado anteriormente en la declaración de la reciente cumbre de la OTAN en el País de Gales, en la Resolución N º 7816 de la Liga Árabe durante la reunión celebrada en Jeddah en presencia de John Kerry y en la Conferencia de París sobre la Seguridad y la Paz en Irak.
"Me gustaría hacer hincapié en este foro como árabe y musulmán", dijo Sheikh Abdullah , "que rechazo categóricamente a la organización terrorista ISIL". También instó a todas las partes a rechazar el uso del nombre de Estado Islámico en consonancia con las opiniones de millones de musulmanes que se oponen firmemente a lo que describió como "la destrucción que se perpetúa por terroristas de una banda criminal".
"En opinión de Emiratos Árabes Unidos -dijo el jeque Abdullah- una guerra contra ISIL no debe conducir a la marginación de los musulmanes sunitas de Irak, quienes deben desempeñar un papel fundamental y vital en el futuro político del país. Es importante para todos nosotros asegurar su unidad política y territorial", insistió.
Agregó que se debe evitar que ISIL cuente con "refugios seguros en la región" y que ello debe lograrse mediante una "acción internacional rápida y global, en plena coordinación y cooperación con el gobierno iraquí".
"Tal acción debe conducir a una estrategia integral porque el peligro que representa el terrorismo no se limita a ese grupo terrorista (ISIL), sino que se extiende a otros conflictos en curso en Yemen, Afganistán, Somalia, Egipto, Libia, norte de África y el África Sahel", dijo.
Sheikh Abdullah señaló que los grupos terroristas también siguen explotando el estado de anarquía en Siria para lograr sus objetivos sin prestar atención a la soberanía y las fronteras nacionales.
"Los crímenes cometidos por este grupo y otros grupos terroristas no conocen límites y están comprometidos con pretextos oportunistas que no tienen relevancia para las creencias y normas. El terrorismo normalmente crece en un terreno fértil del sectarismo y el extremismo y se presenta como una alternativa que atrae a personas ingenuas que pretenden alcanzar metas horribles", apuntó.
El ministro de Relaciones Exteriores de Emiratos agregó asimismo que muchos países estaban preocupados por el creciente número de combatientes de otros lugares que se suman a los conflictos y porque los extremistas están tratando de establecer refugios seguros en las zonas de conflicto, de modo que puedan reclutar combatientes que pueden apoyar su existencia.
Asimismo señaló que la alianza internacional contra el terrorismo debe ser construida con objetivos a largo plazo, no sólo con el objetivo de luchar contra el ISIL, e hizo hincapié en la necesidad de prevenir cualquier estancamiento político en Irak a través de la adopción de un programa nacional que verdaderamente rechace la violencia e incluya a todos los elementos de la población iraquí sin exclusión ni favoritismo.
Emiratos Árabes Unidos, según apuntó, está convencido de que los kurdos han demostrado que son dignos de desempeñar un papel clave en el gobierno de Irak, por lo que alabó su resolución para enfrentarse al ISIL y expresó su esperanza de que la región del Kurdistán preserve su resistencia y estabilidad y siga siendo una parte integral de Irak.
Igualmente reiteró el compromiso de Emiratos Árabes de apoyar a Irak en todo momento, incluyendo el respaldo a su proceso político y a los esfuerzos de reconciliación a través de iniciativas que proporcionen asistencia humanitaria a las personas afectadas por la violencia y la inestabilidad.
Sheikh Abdullah concluyó su declaración diciendo que Emiratos Árabes Unidos da la bienvenida a las resoluciones del Consejo de Seguridad, en particular a la Resolución 2.170 relativa a la lucha contra el terrorismo y sus recursos, incluido el reclutamiento y las finanzas.
En la reunión también estuvieron presentes el Dr. Anwar Mohammed Gargash, ministro de Estado de Asuntos Exteriores, Lana Zaki Nusseibeh, representante permanente de Emiratos Árabes Unidos ante la ONU, y el ministro asistente de Relaciones Exteriores para Asuntos de Seguridad y Militares.
