viernes. 29.03.2024

Ninguna aerolínea en la historia de la aviación ha crecido a un ritmo tan rápido como lo ha hecho la empresa con sede en Dubai. En 30 años, Emirates Airline no sólo se ha convertido en una de las mayores compañías aéreas comerciales en el mundo, sino que ha influido de manera espectacular a toda la industria mundial, según publica el portal Arabian Business.

Hoy en día, Emirates transporta alrededor de 50 millones de pasajeros al año, con una flota de más de 230 aviones. Sus 140 destinos en más de 80 países de seis continentes están continuamente ampliándose. Su fuerza en el sector laboral también es inmensa, 75.000 personas de más de 160 nacionalidades trabajan en la empresa.

Emirates nació hace ahora 30 años, el 25 de octubre de 1985, con un vuelo de Boeing 727-200 a Karachi en Pakistán. Su presidente, el Jeque Ahmed bin Saeed Al Maktoum y el británico Sir Maurice Flanagan tenían dos aviones y 10 millones de dólares estadounidenses para crear la línea aérea, una cifra que hoy sería irrisoria.

El grandioso crecimiento de Emirates ha sido ilustrado por sus múltiples pedidos de aviones. Hoy cuenta con la mayor flota mundial del avión de dos pisos de Airbus, el A380, (para el que también tiene una explanada especial en exclusiva en su terminal en el Aeropuerto Internacional de Dubai) y con aviones de Boeing 777. En alguna ocasión, la empresa ha sido un salvavidas para los fabricantes al realizar pedidos multimillonarios, cuando nadie más estaba comprando.

El 7 de enero de 1991, Emirates dejó su flota en tierra durante varias horas cuando Irak invadió Kuwait. Pero unos meses más tarde, la compañía siguió adelante, ordenando la compra de siete B777, con una opción de siete más, en un acuerdo por 64,5 millones de dólares estadounidenses.

POR DELANTE DE LONDRES HEATROW

También consiguió un puesto en lo que entonces era el aeropuerto internacional más transitado del mundo, Londres Heathrow, que fue superado por Dubai Internacional este último año. La posición en Londres era un símbolo del progreso de Emirates, que en seis años consiguió transportar 25.000 pasajeros a la semana a 23 destinos.

Por su 10 cumpleaños, Emirates volaba a 34 localidades en el Medio Oriente, Asia y Europa. Poco después, entró en el mercado africano, con vuelos a Johannesburgo, Nairobi y Kenia. El continente más tarde se convirtió en uno de sus destinos con mejor oportunidad de negocios.

Durante 1998, la capacidad de la empresa se elevó un 26 por ciento en sólo 12 meses, incluso antes de la primera de las 17 entregas de la nueva generación de A330-200.

Emirates marcó el cambio de siglo convirtiéndose en el primer cliente de Airbus de A380, solicitando siete de ellos en el Salón Aeronáutico de Farnborough. También reservó otros seis B777-300. En el mismo año 2000, se anunció la nueva terminal de 600 millones de dólares en el Aeropuerto International de Dubai, dedicada exclusivamente a la aerolínea Emirates, con una capacidad para 20 millones de pasajeros anuales.

Su primera fase se inauguró en octubre de 2008. Para ayudar a llenar la nueva terminal, Emirates compró 15 aviones A380, ocho A340-600, tres A330 y 25 B777, por 15.000 millones de dólares mientras que el resto de la industria se esforzaba por comprender tanta inversión después del desastre de los ataques del 11 de septiembre de 2001, en Estados Unidos.

EL JEQUE AHMED VIO EL FUTURO

El jeque Ahmed insistió entonces en que el transporte aéreo se duplicaría en los próximos 15 años, a pesar de las dificultades de ese momento. Su intuición demostró su buena visión para los negocios, cuando las cifras de pasajeros de Emirates subieron un 18,3 por ciento, unos 6,8 millones de pasajeros en 2001, mientras que los niveles globales de viajeros cayeron un 4 por ciento.

Emirates continuó expandiendo su flota en su 25 aniversario, con un pedido de 32 aviones A380 y 30 más de B777-300ER. Hoy en día, la edad promedio de la flota de Emirates es de 75 meses, lo que supone la mitad del promedio de la industria mundial, que es de 140 meses.

La base de operaciones de la aerolínea en Dubai, Emiratos Árabes Unidos, tiene una pequeña población de nueve millones de personas (aunque cerca de dos tercios son expatriados), pero se ha aprovechado de su situación geográfica estratégica para atraer a los pasajeros de todos los rincones del mundo.

De hecho, dos tercios de la población mundial se encuentra a un radio de ocho horas de vuelo de Dubai y Emirates ha construido su plan de negocios en una red decisiva que conecta cientos de ciudades a través de su centro de operaciones. A principios de este año, anunció que lanzará el vuelo más largo sin escala del planeta -17 horas y 35 minutos- entre Dubai y Ciudad de Panamá, en América Central, previsto a partir del 1 de febrero de 2016.

También ha estado a la vanguardia de los servicios para pasajeros durante el vuelo. Se convirtió en 1992 en la primera aerolínea en instalar pantallas de televisión en la parte posterior de todos los asientos en todas las clases. En 1994 ofreció el primer servicio de fax en vuelo y de correo electrónico y SMS en 2013. Actualmente está invirtiendo 20 millones de dólares al año para disponer de WiFi en toda su flota.

MILES DE PUESTOS DE TRABAJO EN TODO EL MUNDO

Emirates también ha ayudado a dar un nuevo impulso a los profesionales de la aviación, con cerca de 400.000 personas solicitando empleo para la tripulación de cabina cada año. Sus finanzas también han resistido sistemáticamente anunciando beneficios todos los años (excepto durante 1985) incluso en momentos en que otras compañías se tambaleaban bajo la presión de los altos precios del petróleo, los conflictos o el número de pasajeros en declive.

Un informe, encargado por Emirates Group, reveló que por cada 100 dólares invertidos en el sector de la aviación de Dubai, se generan otros 72 de valor adicional. Por cada 100 empleos directos en la industria, se suman otros 116 indirectos.

Los preparativos ya están en marcha para transferir la aerolínea de bandera de Dubai al nuevo aeropuerto internacional del emirato, Al Maktoum en Dubai World Central, en algún momento de la próxima década. Allí, será capaz de manejar una gran parte de la capacidad prevista de 220 millones de pasajeros.

Emirates también contribuye a las economías de sus países de destino, algunos con datos particularmente agudos. La aerolínea afirma que sus operaciones ofrecen 85.100 puestos de trabajo en la Unión Europea durante 2013-14 y contribuyeron con 7.700 millones de dólares al total del PIB de la UE.

Además, sus pedidos de aviones Airbus significaron 41.000 puestos de trabajo en la base francesa del fabricante, lo que equivale a un impacto de 3.800 millones en el PIB durante ese mismo año. En Estados Unidos, Emirates asegura que sus operaciones contribuyen a su economía gracias entre otros al valor de su cartera de pedidos de Boeing 777, por 90.000 millones de dólares, compatible con la creación al menos de 400.000 empleos en el país.

DESTACADOS APOYOS Y PATROCINIOS

La aerolínea argumentó en su informe anual 2014-15 que sus conexiones directas con ciudades europeas y americanas tuvieron un efecto dominó adicional gracias la mejora de la conectividad de negocio y oportunidades. Estas cifras han sido recalcadas durante el reciente debate sobre los 'cielos abiertos' entre las tres mayores aerolíneas de Estados Unidos y las del Golfo, Emirates, Etihad con sede en Abu Dhabi y Qatar Airways. 

Las denuncias fueron lo suficientemente graves como para que el presidente de Emirates, Sir Tim Clark, viajara a Washington para refutarlas personalmente. El debate continúa abierto, con el Gobierno de Estados Unidos sin tomar aún una decisión sobre las demandas y reconsiderar la política de cielos abiertos entre EE.UU., Emiratos Árabes Unidos y Qatar.

Con clientes potenciales en todos los rincones del mundo, Emirates ha utilizado el patrocinio de eventos deportivos importantes para aumentar su perfil en todo el planeta. Con uno de los presupuestos de patrocinio más grande que cualquier otra aerolínea, gastando cientos de millones de dólares en el apoyo anual de eventos y equipos de fútbol, ​​Fórmula Uno, rugby, cricket, tenis, golf y carreras de caballos.

Por todo ello, Emirates ha sido nombrado la marca de aerolínea más valiosa del mundo, con un valor estimado de 6.600 millones de dólares -sólo la marca- en 2015, según el informe de Brand Finance’s 2015 Global 500. Desde sus humildes comienzos hace 30 años, no hay duda de que Emirates ha despegado y que viaja a velocidad de vértigo.

30 años de Emirates Airline: historia de un viaje impresionante
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