Cientos de dolientes asistieron este sábado al funeral del sargento Khalid Ali Gharib Al Baloushi, que murió mientras estaba en servicio con la operación de la Coalición Árabe 'Restaurar la Esperanza en Yemen'.
El cuerpo del sargento emiratí de 36 años llegó al aeropuerto de Al Bateen en Abu Dhabi y fue trasladado a la mezquita de Al Khulafa Al Rashedeen en Dubai para las oraciones fúnebres.
Su cuerpo fue enterrado en el cementerio de Al Warqa cerca de su primo, el sargento Nader Mubarak Eisa Soliman, que murió la semana pasada, también en Yemen. El entierro tuvo lugar después de las oraciones dhuhr.
El sargento Baloushi deja cinco hijos - una hija, Moza, 18, y los hijos Mansour, 17, Tareq, 12, Jasim, 7 y Naser, 4.
El militar Ali Ibrahim fue el último miembro de la familia en ver al sargento Al Baloushi vivo. "Vi a mi tío, dos horas antes de morir. Fue increíble, recibí una llamada diciéndome que fue martirizado", declaró el emiratí de 33 años, que acompañó el cuerpo de su tío desde Yemen hasta que fue enterrado en su ciudad natal.
"Era un musulmán devoto, atento y servicial. Era como un hermano para mí", añadió Ibrahim.
Los residentes de la zona de Al Warqa 2, donde la familia Al Baloushi reside todavía estaban de duelo por el sargento Soliman cuando recibieron la noticia de otro soldado local fallecido en el cumplimiento del deber.
Los familiares dijeron que el sargento Al Baloushi amaba los deportes y con frecuencia montaba en su quad en el desierto de Dubai.
"Durante su última visita a Dubai, se negó a salir con sus amigos. Dijo que quería pasar el mayor tiempo posible con sus hijos, antes de volver a Yemen", explicó Ghanim Gharib, sobrino del sargento Al Baloushi.
El sargento Baloushi estuvo en Dubai hace 10 días para visitar a su madre en el hospital.
"Nuestra madre tuvo una cirugía en la pierna, y llegó a ver como estaba, pasó algún tiempo con su familia antes de volver al servicio", dijo su hermano Rashid, de 42 años.
