Los conductores de taxi que no sepan hablar inglés deberán recibir formación pero no podrán ser despedidos por este motivo, según ha anunciado la Autoridad de Carreteras y Transporte (RTA).
La RTA recomendará a las empresas de franquicia de taxis que den a sus conductores formación básica de comunicación en inglés para reducir las quejas de clientes que surgen debido a las barreras del idioma, según ha indicado al periódico Khaleej Times el director general de la Agencia de Transporte Público de la RTA, Abdullah Yousef al Ali.
"Si recibimos quejas de los clientes diciendo que encuentran problemas con los taxistas y la principal causa del problema está en sus pobres habilidades de comunicación vamos a informar a la compañía de taxis para que dé a sus conductores lecciones de inglés para mejorar el servicio al cliente", aclara Yousef puntualizando que se trata de "una recomendación, no es obligatorio" para la compañía.
Esta aclaración de la RTA se produce después del anuncio de que los futuros conductores de taxi (en la fase de reclutamiento) deberán pasar una prueba básica de inglés, además de las pruebas psicológicas y de comportamiento, antes de que puedan recibir formación en el RTA y obtener permisos de conducción profesionales.
Además de la prueba de inglés, los nuevos conductores de taxi deberán pasar la evaluación psicométrica basada en los estándares de servicio, capacidad de recuperación, la resolución de problemas y la autogestión antes de que puedan ser declarados aptos para conducir, según la última decisión de la RTA.
