viernes. 29.03.2024

Todo en Emiratos Árabes ha sido espectacular para recibir el Año Nuevo. No se han escatimado ideas ni presupuesto para ver cómo llega 2018, el Año de Zayed, padre de la nación. El Burj Khalifa, alejado de la pirotecnia ha ganado un nuevo recórd, en esta ocasión el del mayor espectáculo de luz y sonido que se haya visto jamás. Y Abu Dhabi puso de largo la Corniche para contemplar un espectáculo pirotécnico más propio de las Mil y una noches con el hotel Emirates Palace como telón de fondo.

Pero durante la Nochevieja mucha de la atención en Emiratos Árabes se centró en Ras Al Khaimah, donde miles y miles de personas acudieron hasta Al Marjan Island para presenciar unos fuegos artificiales que hicieron aflorar de las entregadas gargantas todo tipo de exclamaciones. Y todas positivas.

Desde mucho antes de las 8 pm, hora fijada para cerrar la entrada de la isla, todos los accesos se encontraban colapsados tanto en sentido Unm Al Quwain como en el de Ras Al Khaimah. A las 12 de la noche, con rigurosa puntualidad, comenzaron los fuegos. Fue una explosión de luz y color que bordeó y recorrió todo el perímetro de Al Marjan, pero también numerosos puntos de su interior. 

Lo fuegos se prolongaron durante 10 minutos y no dejaron a nadie indiferente. Al contrario, todos los que aguardaron largas esperas y que se llevaron a los puntos más inverosímiles sus mesas y sillas de camping, aseguraron que mereció la pena. De hecho, hubo quien ya desde por la mañana aguardaba para asegurarse las mejores vistas.

Fue tal la gente que se concentró en la zona, que a las 3 am del primero de enero continuaban los atascos, a esas horas para intentar salir de la isla y regresar a sus hogares.

En Dubai el Burj Khalifa fue de nuevo protagonista. El cálculo contempla que 1,5 millones de personas se concentraron alrededor del edificio más alto del planeta para recibir el nuevo año y presenciar un espectáculo de luz y sólido que ha establecido un récord mundial Guinness.

Emaar, promotora del área urbanística que envuelve al Burj Khalifa, ha optado en esta ocasión por reemplazar los fuegos artificiales por un espectáculo de láser que incluía una dinámica danza sincronizada con la música. También duró 10 minutos.

La exhibición comenzó anunciando 2018 como Año de Zayed y pasó a mostrar los símbolos de la nación: la bandera de Emiratos Árabes Unidos, el halcón en vuelo y el idioma árabe, todo ello con grandiosidad. Y aunque no hubo ni polvora ni truenos, los presentes volvieron a quedar literalmente con la boca abierta.

Los fuegos artificiales tuvieron presencia en Dubai durante la Nochevieja en el Burj Al Arab y en el Global Village, donde fueron seguidos por una verdadera multitud.

También en Abu Dhabi fue recibido el año con alegría en una noche que resultó verdaderamente inolvidable. Concentrados en el rompeolas que bordea la Corniche de la capital emiratí, miles de residentes disfrutaron de los fuegos artificiales y otras celebraciones de Año Nuevo. Además, acompañó el tiempo: cielo despejado y apenas brisa.

La cuenta atrás hasta alcanzar 2018 apareció en el edificio de la sede de Adnoc y a medianoche se mostró una imagen del padre fundador, el jeque Zayed, para dar a conocer el año que se dedicará a su persona.

Los fuegos artificiales también se prolongaron en este caso durante 10 minutos y dibujaron sobre el cielo de Abu Dhabi un espectáculo pirotécnico con el Emirates Palace, Etihad Towers y el horizonte de la capital.

Emiratos Árabes brilla con intensidad durante los primeros minutos de 2018
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