martes. 19.03.2024

Ahora en verano, si se busca un día adecuado en el que la temperatura no haga estallar el termómetro, es un buen momento para disfrutar de la Fuente de Dubai sin las aglomeraciones que se producen en otras épocas del año, fundamentalmente en invierno.

Lo aconsejable es ir por la noche, cuando los grados han bajado algo. Por ejemplo, esta semana de mediados de agosto está resultando algo más agradable, por lo que se puede estar al aire libre y presenciar un espectáculo único con tranquilidad.

Incluso, si así se desea y se busca una perspectiva nueva, es posible encontrar un hueco sin excesiva dificultad en el espectacular mirador de la tienda de Apple en Dubai Mall -la más lujosa del mundo-. Este punto de observación es muy particular.

Además, quienes quieran hacerse un selfie cien por cien dubaití tienen la opción de posar ante el gran luminoso ‘I love Dubai’, una imagen que también recoge los impresionantes chorros de agua camino del cielo y el ambiente general de la plaza.

La Fuente de Dubai (Dubai Fountain) se inauguró en el año 2009 y es la más grande del planeta. El lugar elegido para su instalación es privilegiado: ante el Burj Khalifa, el edificio más alto del mundo. Desde el año pasado también tiene como telón de fondo el increíble edificio de la Ópera, que fue abierto el pasado 31 de agosto por el español Plácido Domingo.

La fuente mide 275 metros de longitud y cuenta con 6.600 focos y 50 video proyectores para iluminar el agua. Sus impulsores son capaces de lanzar el agua a más de 150 metros de altura.

La experiencia de verla en acción (hay una oportunidad a diario cada treinta minutos a partir de las 19.00 horas) es también sobresaliente en verano. 

'I love Dubai' también verano
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