Redacción
17 de julio de 2018, 16:31
Un árabe de 41 años en el emirato de Ajman fue sentenciado a siete años de prisión y al pago de una multa de 500.000 dirhams por "insultar a dios". Además, sera deportado tras cumplir su sentencia y se hará cargo del pago de los procedimientos legales.
El Tribunal Penal también ordenó que su teléfono fuera confiscado, según publica el diario Al Bayan.
La querellante, una mujer, declaró ante el tribunal que el acusado la calumnió e insultó a Dios durante un altercado entre ellos.
Al extraer los mensajes de voz, las autoridades descubrieron que el acusado había insultado voluntariamente a la demandante con palabras blasfemas.