Decenas de militantes de Al Qaeda y Daesh, incluidos algunos de sus líderes, se han rendido a los servicios de seguridad en la provincia meridional de Lahj en Yemen, según informó el jefe de seguridad de la provincia al diario Gulf News.
"Ocho altos cargos de Daesh y Al Qaeda se han entregado a las autoridades de seguridad", manifestó el general de brigada Adel Al Halimi.
"Abdul Rahman Al Adani, un alto militante de Al Qaeda que planeó ataques terroristas en Aden y Lahj, se había entregado a los servicios de seguridad hace nueve días", añadió el brigadier.
Al Qaeda y otros grupos militantes rebeldes capturaron el año pasado grandes extensiones de tierra en muchas provincias del sur de Yemen aprovechando el vacío de seguridad por los combates entre las fuerzas gubernamentales y los hutíes.
La Coalición liderada por Arabia Saudita, principalmente la formada por EAU han reclutado, entrenado y armado a cientos de combatientes locales que recuperaron la mayor parte del sur del país incluyendo Adén, Lahj y Hadramout y la liberaron de los miembros de Al Qaeda y del Daesh.
Al Halimi declaró que decenas de militantes jóvenes se han rendido o han sido detenidos por las tropas del ejército en la provincia desde abril. "Han denunciado la violencia y ahora nos están ayudando activamente".
Las fuerzas gubernamentales comenzaron los ataques militares contra bastiones de Al Qaeda en abril. Con el respaldo del apoyo aéreo de la Coalición, las fuerzas incautaron Huta, la capital de Lahj y muchos otros distritos. En el mismo mes, las fuerzas masivas entrenadas por EAU retomaron la ciudad de Al Mukalla, la capital de la provincia de Hadramout y la quinta ciudad de Yemen.
Al Halimi cree que la amenaza de Al Qaeda en la provincia ha disminuido y los militantes no serán capaces de reaparecer. "La provincia está fuera de peligro. A Al Qaeda y Daesh se le han quitado los colmillos".
El funcionario de seguridad citó dos factores principales en los éxitos de sus fuerzas para purgar de rebeldes la provincia. "Hemos aplicado una política de mano de hierro y nos hemos acercamos a dignatarios locales, jefes tribales y predicadores. Les hemos pedido que convenzan a la gente a abandonar los engaños de Al Qaeda".
En Hadramout, funcionarios de seguridad locales revelaron este martes que las fuerzas de elite allanaron este viernes un hospital en Seiyun, la segunda ciudad importante de la provincia, donde un "alto" militante de Al Qaeda estaba recibiendo tratamiento médico. Un funcionario de seguridad que supervisó el ataque, dijo bajo condición de anonimato que las fuerzas detuvieron al hombre y a otras cuatro personas que lo custodiaban fuera del hospital.
