Kuwait ordenó este miércoles la expulsión del país del embajador de Filipinas, Renato Villa, después de que el Ministerio kuwaití de Exteriores asegurase que "trabajadores" de la legación diplomática filipina "facilitaron la huida" de empleadas del hogar de la misma nacionalidad.
La agencia oficial de noticias estatal KUNA, que reprodujo un comunicado del Ministerio de Exteriores, aseguró que el diplomático filipino tendrá que abandonar el país árabe antes de que se cumplan siete días, y llamó a consultas a su representante en el país asiático.
Según el Ministerio, esta medida se ha tomado después de que la embajada filipina "enviara vehículos" para que las empleadas de hogar filipinas "escapasen de las casas" de sus empleadores, basándose en un vídeo divulgado recientemente.
Este incidente es "una violación clara y una contradicción grave a las reglas e instrucciones del trabajo diplomático", denunció en comunicado el Ministerio, ya que "miembros de la Embajada y otros facilitaron la huida de empleadas de hogar de nacionalidad filipina", lo que representa "un desafío claro a las leyes del Estado kuwaití y los acuerdos internacionales".
Asimismo, este asunto lo consideró como una "injerencia en los asuntos internos del país".
El pasado 23 de abril, la policía kuwaití detuvo a dos filipinos que "animaban" a las empleadas de hogar de la misma nacionalidad a escapar de las casas de sus empleadores, sin precisar más detalles.
Esta decisión se produce en un momento tenso entre ambos países ya que el pasado febrero se descubrió el cadáver de una empleada de hogar filipina asesinada, identificada como Joanna Demafelis, de 29 años, en el congelador de sus empleadores -sentenciados a la horca-, un año después de haber desaparecido.
Este caso desató tal polémica en Filipinas que llevó al presidente del país asiático, Rodrigo Duterte, a arremeter contra el Gobierno árabe por permitir los abusos contra las empleadas domésticas y a declarar que los kuwaitíes "carecen de valores".
A raíz del asesinato, Manila prohibió de forma temporal los viajes a Kuwait para sus ciudadanos que desean trabajar en ese país, donde se calcula que hay más de 250.000 filipinos, la mayoría empleadas del hogar.
Kuwait empujó además a varios miles de filipinos que tuvieran algún tipo de problema o les caducaba el visado a regresar a su país desde el Golfo Arábigo.
