El prominente líder de la oposición de Kuwait Mussallam al-Barrak fue puesto en libertad este viernes después de cumplir una condena de dos años por insultar al emir en público.
Barrak, de 61 años, salió en libertad de la prisión central de Kuwait con una recepción emotiva por familiares y seguidores que rompieron las vallas de seguridad y rodearon su vehículo.
El ex legislador, que estuvo seis mandatos consecutivos en el Parlamento de Kuwait desde 1999 hasta 2012, ha criticado abiertamente al gobierno después de su liberación.
Barrak, todavía vestido con un uniforme de la prisión de color beige gritó a la multitud que lo vitoreaba.
Cientos de miembros de su familia y seguidores desafiaron el calor, los vientos abrasadores y esperaron más de tres horas hasta que Barrak salió de la cárcel central, a 25 kilómetros al suroeste de la ciudad de Kuwait.
La multitud jubilosa cantaba y coreaba consignas alabando Barrak, saludándolo como "la conciencia del pueblo".
Barrak dio un breve discurso ante una larga caravana que lo acompañó a su residencia, donde más seguidores le estaban esperando.
En febrero de 2015, Barrak fue condenado a dos años de prisión por los comentarios que había hecho en un acto público en 2012, que socavaba el estado del emir Sheikh Sabah Al-Ahmad Al-Sabah.
Barrak había estado protestando por los cambios de la ley electoral del reino ya que sostenía permitiría a las autoridades manipular los resultados de las elecciones. En su discurso negó socavar al gobernante del estado del Golfo.
El encarcelamiento de este líder de la oposición tan popular se consideró una ofensiva gubernamental sin precedentes contra la disidencia en el reino.
Decenas de activistas de la oposición en Kuwait están en la cárcel o se enfrentan a juicio por insultar al emir, incluso a través de medios de comunicación social.
La liberación de Barrak se produce meses después de que la mayoría de sus socios en la alianza opositora terminara con un boicot de cuatro años a las elecciones generales.
El emirato rico en petróleo de Kuwait es considerado como un pionero en el funcionamiento de un sistema parlamentario entre las monarquías del Golfo.
El estado miembro de la OPEP se levanta sobre el siete por ciento de las reservas mundiales de crudo y bombea alrededor de 2,8 millones de barriles de petróleo por día.
