Un temblor de magnitud 5,4 ha sido registrado en la frontera entre Irán e Irak este domingo. El hipocentro se encontraba a una profundidad de 52 kilómetros y el epicentro a 170 kilómetros de distancia de la ciudad de Bagdad, según informa el Centro Sismológico Europeo del Mediterráneo.
Como consecuencia del temblor al menos 23 personas han resultado heridas, informa la agencia de noticias Tasnim. Todas recibieron asistencia médica de forma ambulatoria, según explicó un funcionario de Sanidad de la provincia iraní de Kermanshah.
El área afectada tiene una actividad sísmica muy intensa. Uno de los últimos terremotos de gran magnitud (7,3) se produjo allí en noviembre del 2017 en la provincia de Kermanshah, también cerca de la frontera con Irak y se pudo sentir en Emiratos Árabes. Dicho seísmo dejó al menos 600 muertos y más de 10.000 heridos, según ANF News.
El 8 de enero un temblor de magnitud 5,1 hirió a 51 personas también en Kermanshah.
