Se pone el sol en el país, Qatar rompe el ayuno diario y se despierta de su letargo. Abren los restaurantes, las tiendas y las cafeterías. Los centros comerciales retoman la vida, sus ciudadanos ya han comido y bebido. Hasta aquí, un día más de Ramadán, pero no estamos viviendo "un día más". Ayer varios países vecinos, entre ellos, Arabia Saudí, cerraron sus fronteras por tierra, mar y aire al Estado de Qatar. Queda bloqueado cualquier paso de personas o de mercancías.
Ayer los ciudadanos salieron a comprar alertados, temiendo que se agotaran los alimentos y el agua. Teniendo en cuenta que prácticamente todo es importado en este país y que gran cantidad de la comida llega por vía terrestre desde nuestra vecina "Saudi". Precisamente ese miedo provocó que neveras y pasillos quedaran vacíos en muchos supermercados. Este hecho se retroalimentaba y los rumores se propagaban veloces y agitados por el miedo creando una situación de alarma.
Pero el segundo día, con la gente ya relajada y con sus despensas llenas de alimentos, la vida ha vuelto a la normalidad. Otra cuestión es la situación política del país y económica (a todos los niveles). Pero el día a día de los ciudadanos se ha restablecido. Los supermercados tienen comida. Quizá en algunos faltan ciertos productos, pero no existen huecos. Si se acaba la leche reponen con otra o con otro alimento. Con esto se consigue un doble objetivo: una gestión eficaz de ese punto de venta y una sensación de normalidad. Un espacio vacío tiene un gran efecto a nivel psicológico.
Ahora es cuando familiares y amigos nos llaman desde nuestros países de origen. Se empieza a hablar del tema. Al verlo desde fuera y desde lejos, se llega a exagerar y nuestros allegados se asustan. Y dicho esto, no quiero que parezca que esto frivolizando. La situación política es compleja. Las consecuencias económicas van a ser devastadoras. Pero nuestra seguridad no se ha visto afectada ni creo que lo haga y no nos vamos a quedar sin alimentos.
Empresas y gobierno están trabajando para importar alimentos a través de otras vías. Recuerdo que la coalición liderada por Arabia Saudí ha cerrado sus fronteras. Pero solo lo han hecho esos países. Si, por ejemplo yo quisiera volar ahora a España, podría hacerlo. Qatar Airways, cuya gestión está resultando impecable, ha establecido dos corredores para bordear el espacio aéreo "prohibido". Además, con precios mucho más bajos de a los que nos tiene habituados. Si necesitara viajar, por ejemplo, a Dubai, podría hacerlo, pero no de manera directa, sino haciendo escala en un tercer país como Omán.
Normalmente somos muy críticos con Qatar, con su gobierno y con su gestión. Desde mi experiencia y mi opinión, están manejando la situación y gestionando la crisis de manera que el impacto en el ciudadano sea el mínimo y que se mantenga la normalidad. Desconozco cómo se desarrollan los asuntos diplomáticos. Los de nuestro día a día lo están llevando muy bien. Nos sentimos seguros y se ha apaciguado el pánico inicial.
Por el cariño que le tengo a este país (aunque a veces me haya quejado) espero que se resuelva la situación con el menor impacto posible, que seguro que es grande. Y repito para terminar, ojalá se solucione con las menores secuelas posibles para Qatar.