Un esposo, que fue acusado de matar a su esposa arrojándole ácido porque la mujer quería divorciarse de él, ha sido condenado a muerte.
El Tribunal de Primera Instancia Penal de Abu Dhabi emitió el veredicto al emiratí después de que la familia de la mujer se negara a indultar al asesino a cambio de dinero de sangre e insistió en que se le impusiera la pena de muerte.
Según documentos judiciales, la madre emiratí de seis hijos pidió el divorcio después de descubrir que el hombre se había casado por segunda vez.
El divorcio no se llevo a cabo ya que el marido estaba en prisión en ese momento por delitos relacionados con drogas y por emitir cheques sin fondos. Tras su liberación en febrero de 2016, el marido fue a la casa de su primera esposa y la confrontó, acusándola de adulterio.
El emiratí supuestamente verificó el teléfono de su esposa para ver si tenía alguna relación extramatrimonial, pero cuando no pudo encontrar nada, vertió ácido sobre su cuerpo frente a tres de sus hijos.
El hijo mayor de la pareja, ahora de 17 años, y su hermano menor también sufrieron quemaduras al intentar rescatar a su madre. Sin embargo, lograron llamar a la ambulancia que la llevó al hospital.
La mujer ingresó en el hospital Al Mafraq antes de ser trasladada a Alemania para ser tratada por un experto en quemaduras, pero murió a causa de sus heridas. Sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en más del 70 por ciento de su cuerpo.
Su familia también había presentado una demanda de compensación civil temporal contra el emiratí, exigiendo 200.000 dirhams por los daños sufridos.
Las autoridades señalaron que mientras estuvo en la cárcel de Al Wathba, el hombre había intentado suicidarse dos veces colgándose con la ropa de otros reclusos.
La sentencia de muerte puede ser apelada dentro de los 14 días posteriores a la emisión de la resolución.
