El Tribunal de Faltas de Ras Al Khaimah ha ordenado a un expatriado asiático pagar una multa de 10.000 dirhams después de haber sido encontrado culpable de poseer una gran cantidad de bebidas alcohólicas con la intención de traficar.
De acuerdo con los documentos del tribunal, el departamento de investigación criminal de la Policía RAK recibió información de agentes secretos del acusado que guardaba muchas botellas de licor en su casa.
Una vez verificada la información, la policía localizó al sospechoso y confiscó el producto.
El licor incautado tenía como fin la venta entre los trabajadores de la construcción.
El detenido, de 48 años y empleado en una granja, tenía en su poder 169 latas y botellas de diferentes licores. Al ser interrogado, admitió poseer las botellas y latas de bebidas alcohólicas con la intención de tráfico entre los trabajadores que viven en su zona.
