El cuerpo de la jueza Sheila Abdus-Salaam, de 65 años, fue descubierto el pasado miércoles, alrededor de la 13:45 horas, flotando en el río Hudson, cerca de la calle 132 y Hudson Parkway, según fuentes policiales.
La jueza Abdus-Salaam, abrió un impotrante capítulo en la historia legal de Estados Unidos, al convertirse no solo en la primera mujer musulmana en ocupar un asiento en el más alto tribunal de justicia del país, sino también en la primera afroamericana nombrada para servir en la Corte de Apelaciones del estado de Nueva York.
Según una información de eldiariony.com, la jueza había sido reportada desaparecida de su casa en Harlem desde temprano en la mañana, y que su cuerpo no mostraba traumas o lesiones, por lo que se descarta preliminarmente que haya sido asesinada y los peritos se inclinan por el suicidio.
“La juez Sheila Abdus-Salaam fue una pionera de la jurisprudencia y una fuerza en pro del bien. En nombre de los neoyorquinos le extiendo a su familia mis condolencias”, escribió el gobernador Cuomo en su cuenta de Twitter el miércoles por la noche.
“Me sentí orgulloso de nombrarla al más alto tribunal del estado y estoy profundamente entristecida por su fallecimiento”, expresó la máxima autoridad civil del estado.
Previamente, Abdus-Salaam, quien estaba graduada de derecho por la escuela de leyes de la Universidad de Columbia, había sido elegida al tribunal supremo en 1993 y nombrada jueza asociada de su división de apelaciones en marzo de 2009 por el gobernador David Paterson.
Fue nombrada para el Tribunal de Apelaciones del estado por el gobernador Cuomo en 2013.
