Testigos del asesinato del centro comercial de Reem Island en diciembre de 2014 describieron la escena del crimen como "sangrienta y fuerte", según declararon en el Tribunal Supremo Federal este lunes, y publica el diario The National.
A la acusada, Alaa Al Hashemi, de 30 años, se le juzga por el asesinato de la maestra estadounidense Ibolya Ryan en Boutik Mall. También se le acusa de construir una bomba y de intentar asesinar a un médico egipcio-americano dejando el explosivo frente a su apartamento.
Los testigos declararon que escucharon gritos, palabras en tonos bajos en árabe y vieron una mano ensangrentada lanzando un cuchillo de mango azul cubierto de sangre por debajo de la puerta del baño para minusválidos en el centro comercial.
El médico que descubrió una bomba en su apartamento también acudió a declarar informando que en un principio pensó que el artefacto que dejaron en su puerta podría haber sido fuegos artificiales. Su hijo, que fue quien encontró el dispositivo, acudió a dar testimonio, afirmando que había visto un "objeto extraño" que a su juicio podría ser un artilugio para celebrar el Día Nacional.
El asesinato tuvo lugar el 1 de diciembre, el día antes del Día Nacional de Emiratos Árabes Unidos. Un oficial del Departamento de Investigación Criminal CID declaró que la acusada le dijo, cuando la policía allanó su casa, que había puesto el artefacto explosivo una vez cometido el crimen.
El caso fue aplazado hasta el 18 de mayo, cuando el tribunal haya examinado el informe médico detallado de la acusada.
