Los agentes de policía de Dubai allanaron una habitación de hotel para arrestar a una mujer policía que estaba tomando una ducha con un hombre, según publica el diario The National.
El Tribunal de Faltas de Dubai juzgó el caso de una oficial de policía de los Emiratos de 30 años, que tras un soplo se descubrió que mantenía relaciones sexuales con hombres por dinero.
Se inició una investigación y la policía conoció que la pareja había reservado una habitación de un hotel en Dubai Marina. A eso de la 1 de la madrugada del 19 de noviembre la policía entró en la habitación para encontrarla en la ducha desnuda junto a un libanés de 35 años.
La mujer policía negó haber mantenido relaciones sexuales con el hombre y aseguró que sólo habían bebido un poco de vino con la cena antes de ir a la habitación a tomar una ducha.
Pero la evidencia obtenida de la habitación, así como los exámenes corporales dieron como resultado que habían tenido relaciones sexuales esa noche.
El hombre libanés declaró que conoció a la joven tres meses antes en un club nocturno, donde "ella estaba con un grupo de hombres y mujeres, e intercambiamos nuestros números de teléfono. Después empezamos a hablar. Yo sabía que ella estaba divorciada y que trabajaba y estudiaba en la universidad, pero nunca me reveló su profesión".
El hombre declaró que su primera relación sexual ocurrió en una reunión en Yas Island, después de lo cual se marchó a los Estados Unidos durante tres semanas.
"Cuando volví del viaje nos reencontramos el 18 de noviembre del año pasado en un bar de Jumeirah, donde almorzamos y tomamos un poco de alcohol y luego fuimos a una habitación de hotel que había reservado y mantuvimos relaciones sexuales", agregó el joven quien aseguró no hubo intercambio de dinero.
La mujer policía, sin embargo, negó haber tenido relaciones sexuales con el libanés y declaró que sólo se sentaron en la habitación del hotel después de cenar, luego se dieron una ducha y fue entonces cuando fueron detenidos por la policía. La joven manifestó que estaba demasiado borracha como para ser capaz de mantener relaciones sexuales.
En el tribunal, ambos negaron tener relaciones sexuales consensuales fuera del matrimonio y el consumo de alcohol sin licencia. Declararon que se habían casado y presentaron un certificado de matrimonio al presidente del tribunal.
El tribunal a pesar de ello los declaró culpables y aunque suspendió la condena de un año en la cárcel por el cargo de sexo fuera del matrimonio, les impuso una multa de 2.000 dirhams a cada uno por consumo de alcohol, además el libanés será deportado.
