(Texto y foto: FIFA.com) Lo que sólo algunos fanáticos muy fanáticos podían soñar antes del inicio de la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™ se cumplió el martes 24 de junio: en el Grupo D, el de los tres campeones del mundo, Costa Rica se quedó con la primera posición tras igualar 0-0 con Inglaterra e hizo historia grande en un estadio Mineirão, de Belo Horizonte, que fue pura vida.
El festejo de los hinchas estuvo a la altura de lo conseguido por una generación que, como mínimo, ya está a la altura de la que accedió a los octavos de final de Italia 1990 tras dejar en el camino a Suecia y Escocia en la fase de grupos.
Otra vez con una gran organización colectiva, en esta oportunidad ante una Inglaterra eliminada y con nueve cambios con respecto a la derrota ante Uruguay, el equipo de Jorge Luis Pinto supo templar los nervios de estar ante una oportunidad única, un nuevo gesto de madurez de una de las revelaciones del mundial.
Supo generar peligro en el inicio del partido, con un buen movimiento de Joel Campbell, pero su remate rebotó en Gary Cahill y se fue apenas rozando el poste. Quien probó la dureza del arco fue Celso Borges con un impecable tiro libre que pegó en el travesaño.
Por su parte, los ingleses llegaron mediante dos de sus joyas, Jack Wilshere y Daniel Sturridge.
Bronce y despedidas
El segundo período vio a Inglaterra intentando llevarse algo de esta frustrante Copa Mundial para los pross, muy probablemente la última de figuras como Steven Gerrard y Frank Lampard, que hicieron el esfuerzo de poder quedarse al menos con tres puntos de honor.
No se los permitió un sólido conjunto, que concedió apenas un gol en la primera fase, un indicativo de su firmeza defensiva y de que cuenta con uno de los mejores arqueros del torneo, Keylor Navas, siempre preparado para salvar a un equipo que quiere más.
Costa Rica se medirá en los octavos de final el domingo 29 de junio en el Arena Pernambuco de Recife ante el segundo del Grupo C, mientras que Inglaterra se despde del certamen.
