En pleno centro de una de las áreas más vanguardistas de Dubai, Alserkal Avenue, está exponiendo el pintor peruano German Fernández su segunda exhibición en solitario: 'The journey man II: In the name of the father', que fue inaugurada el pasado lunes en la galería de arte FN Designs.
Nada más entrar en la sala hay un mapa, el mapa de la ciudad imaginaria de Fernández. “La ciudad es un lugar donde intentamos reconstruir algunos significados de nuestra realidad, definiendo y clasificando ese mundo imaginario, dándole sentido, donde uno lucha por conseguir ver el mundo real”, señaló Fernández.
Las obras que componen la exposición trabajan esta vez con la idea de significado e identidad. Son escenas de personajes enmascarados imaginados en una realidad urbana imaginada, 'la ciudad'. En este lugar ficticio el hombre intenta encontrar el significado que no puede hallar en el mundo real.
Justo en el centro de la exposición hay un colchón inspirado en la obra de teatro 'La vida es sueño' de Calderón de la Barca, que también quiere mostrar la relación que existe entre el sueño, el mundo imaginario (que en este caso ha creado Fernández) y la vida real. La ciudad en el colchón es “redonda, como la Tierra, como un reloj que representa el tiempo y queda reflejada en el dosel de la cama para transmitir la conexión entre la vida y el sueño, entre la realidad y la ficción”, agregó el peruano.
“Las obras tratan de completar un gran ciclo que de algún modo hablan de la ausencia o de la construcción de una identidad y darle significado, tanto para el mundo como para ti mismo”, continuó.
Entre los trabajos también encontramos una secuela de vida de uno de los protagonistas de las obras: en el primer cuadro el personaje está en una etapa de caída; en el segundo está luchando y trata de aguantar y sobrevivir gracias a una máquina, mientras que en la última pintura del ciclo, de alguna manera, nuestro personaje ha logrado flotar por sí solo”, explicó. Los colores durante la fase de crecimiento en la secuela son muy importantes a la hora de analizar la obra.
Las máscaras que llevan la mayoría de los personajes, “son como un recordatorio de que el proceso de identidad nunca se completa”, apuntó el pintor. “Al igual que la historia, la identidad está en un proceso de redefinición constante”, concluyó.
Fernández, quien actualmente trabaja en Dubai como diseñador para el grupo Dubai Media Incorporated, fue invitado por Sheika Wafa Hasher Al Maktoum, fundadora de la galería que está acogiendo la muestra actualmente, para exponer sus nuevos trabajos.
The journey man II: In the name of the father', que se estará exponiendo durante un mes en FN Designs, “va sobre llenar un vacío o la ausencia de algo”, señala Sheika Wafa en el prefacio del dossier de la obra. “La pregunta es, ¿qué más puede ser imaginable?”.
