viernes. 26.04.2024

Un grupo de mexicanos encabezados por la embajadora de México en Abu Dhabi, Francisca Mendez Escobar, se adentró en lo más profundo del emirato de Ras Al Khaimah para conocer de cerca a la tribu Al Khawater, en la localidad de Saadi.

Allí, el jeque Sultán bin Ali Al Khateri, jefe de la tribu, junto a su familia, recibió a la agrupación compuesta por residentes hispanos en Emiratos Árabes Unidos (EAU) que se dedican a diferentes labores en los campos de la cultura, el arte y la diplomacia.

Durante el encuentro, los asistentes tuvieron la oportunidad de intercambiar puntos de vista, conocimientos, tradiciones y mencionaron la importancia de la apertura de la ruta de la aerolínea Emirates entre México y EAU para poder fortalecer el turismo entre ambas regiones.

La embajadora de México descubrió a la familia emiratí el arte milenario de Olinalá, que está comenzando a expandirse fuera del territorio nacional y unas semanas atrás se exhibió mediante diferentes obras, retratos, en el distrito del diseño de Dubai. El ministro de Relaciones Exteriores emiratí, el jeque Abdullah bin Zayed Al Nahyan, ya cuenta con una pintura del Padre Zayed hecha en este arte prehispánico, que le fue entregada durante su reciente visita a México.

Escobar le mostró al jefe de la tribu una bandeja en madera con tintas minerales con flores y plantas originales de Olinalá, únicas en el mundo.

La pintora mexicana Myriam Khruisheer, una de las asistentes al evento, presentó a la familia una pintura de un camello sobre papel de oro.

La también artistas Alejandra Palos mostró a la familia un libro del desierto de Baja California, que enseña las similitudes entre el paisaje emiratí con la de este lugar tan lejano de América.

El encuentro cultural fue organizado por la antropóloga española Inocenta Sánchez, especialista en el desarrollo de la inteligencia emocional y quien vivió con la tribu Al Khawater durante años mientras realizaba uno de sus estudios.

Los niños fueron parte importante de este evento multicultural.

“Los niños son los futuros diplomáticos que aprenden de la mano de sus padres, tíos, abuelos, el arte de las relaciones con gentes de países tan lejanos y aprenden también a respetar las diferencias”, señaló Sánchez tras el encuentro.

Los asistentes tuvieron la oportunidad de disfrutar de un almuerzo tradicional emiratí. Tras la comida también pudieron ver de cerca una muestra del deporte milenario de la cetrería en el desierto de Ras Al Khaimah. 

La comunidad mexicana se adentra en las raíces de las tribus emiratíes
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