El consorcio español del AVE Medina-La Meca da por hecho un acuerdo con Arabia Saudita antes de final de año sobre la fecha final para la entrega de las obras y los sobrecostes generados por los imprevistos en el proyecto. Las autoridades saudíes han aplazado la visita a Madrid del ministro de Transportes hasta que haya un titular de Fomento con plenos poderes para rubricar el pacto.
El consorcio se reúne esta semana en Madrid, pero con Rumaih Mohammed Al-Rumaih, el presidente de Saudi Railways Organization (SRO), organismo del Gobierno árabe promotor y encargado del desarrollo del megaproyecto.
El viaje del presidente de SRO a España se produce a pesar de que finalmente no acude junto con el ministro árabe de Transportes, Sulaiman bin Abdullah Al-Hamdan, tal como inicialmente se había planteado, quien ha declinado acudir ante la actual situación de interinidad del Gobierno español, según confirman a El Confidencial Digital fuentes próximas al Ejecutivo.
La visita y los encuentros tendrán lugar mientras el consorcio, su contratista, la SRO, y el Gobierno árabe tienen abiertas negociaciones sobre la demora y los sobrecostes que acumula la construcción del denominado “AVE del Desierto”, uno de los mayores proyectos logrados por empresas españolas en el exterior, valorado en unos 6.700 millones de euros.
Según fuentes próximas a las negociaciones, Arabia Saudita ha aceptado los argumentos del consorcio español de que la causa del retraso en la obra está, en gran parte, en la demora que acumula la fase previa del proyecto, la que acomete un grupo de empresas chinas.
“Las autoridades saudíes han valorado que España está reduciendo a la mitad el retraso que viene acumulando el consorcio chino: de dos años a uno”, explican en una de las constructoras implicadas.
Los técnicos españoles están recibiendo de las compañías chinas “tramos salteados”, que les obligan a desplazar equipos de un lado a otro continuamente y a realizar cálculos permanente para que las infraestructuras después cuadren. Unos trabajos adicionales que Arabia Saudí también está valorando.
La mayoría de las compañías españolas involucradas en el proyecto están dispuestas a reducir los plazos de entrega casi un año, es decir, a mediados de 2018. Unos tiempos que se acercan más a las fechas que las autoridades saudíes manejan y favorecerá también el acuerdo para el pago de sobrecostes que valora ahora un experto independiente.
En el consorcio dan por hecho ya, después de meses de continuas discrepancias, que el pacto es cuestión de meses y atribuyen también su demora, entre otros factores, a la falta de un Gobierno en España con plenas capacidades.
