La compañía aérea Emirates anunció este jueves un retroceso de su beneficio neto del 86% en el primer semestre de 2018 hasta solo 62 millones de dólares, a raíz del alza de los precios del petróleo y a efectos de cambio negativos.
La aerolínea con sede en Dubai declaró por otro lado una cifra de negocios que registró un alza de 10% en el primer semestre de su ejercicio 2018-2019, en 13.300 millones de dólares, y un aumento de 3% del número de pasajeros transportados (30,1 millones) para un crecimiento global de su capacidad de 3%.
"El alto coste del combustible y la depreciación de las monedas locales en mercados como India, Brasil, Angola e Irán han reducido nuestra ganancia en aproximadamente 4.600 millones de dirhams, declaró el presidente de Emirates el jeque Ahmed bin Said al Maktum, citado en un comunicado.
Según él, el sector del transporte aéreo enfrenta muchos "desafíos", como la presión sobre los rendimientos y la "incertidumbre que pesa sobre las condiciones económicas y políticas" en la Península Arábiga y en el resto del mundo.
"Los próximos seis meses serán difíciles, pero las fundaciones del Grupo Emirates siguen sólidas", agregó.
En los últimos seis meses, Emirates ha reducido sus efectivos en 1.380 personas para llevarlos a 101.983, debido al "desgaste natural del personal, junto con un ritmo lento de reclutamiento", así como a los programas de optimización y de reorganización, señaló Emirates.
