EAU declaró este martes que Qatar tendrá que proporcionar un "mapa de ruta garantizado" antes de considerar volver a establecer los lazos entre los dos países.
Junto con la vecina Arabia Saudita y sus aliados más cercanos, EAU rompió relaciones con Qatar este lunes, cerró todas las fronteras, suspendió todos los vuelos y otorgó a los qataríes 14 días para salir del país en lo que se considera la mayor crisis diplomática en años en la región.
"Necesitamos un plan de trabajo con garantías para recuperar la confianza después de la ruptura de nuestras relaciones", escribió el ministro de Estado de Asuntos Exteriores de EAU, Anwar Gargash, en Twitter.
Gargash acusa a Doha de convertir "su dinero y sus medios de comunicación en partidismo y extremismo", tuiteó el ministro a primera hora del martes.
La crisis con Qatar es el resultado de "años de incitación de un hermano contra sus hermanos", añadió el ministro.
"La cuestión no gira en torno a la soberanía o la toma de decisiones, sino más bien en un rechazo a las políticas que tienen como objetivo hacer daño a los hermanos y socavar la seguridad y la estabilidad en el Golfo Arábigo. Todos no podemos estar equivocados", escribió Gargash en Twitter.
Bahréin, Egipto, Yemen, Mauricio y las Maldivas también se encuentran entre los gobiernos que rompieron relaciones.
Un viejo aliado de Estados Unidos, Qatar ha levantado sospechas persistentes en Washington y entre sus vecinos del Golfo sobre sus estrechas relaciones con el grupo islamista palestino Hamás y los Hermanos Musulmanes.
Qatar alberga la mayor base aérea estadounidense en la región, la cual es crucial en la lucha contra los yihadistas del grupo Daesh. No obstante, el presidente americano Donald Trump ha respaldado este martes las posiciones de Arabia Saudita y Emiratos Árabes ante la crisis de Qatar.
La brecha entre los aliados del Golfo, se produce ni un mes después que el presidente Trump visitara Arabia Saudita y solicitara un frente unido contra el extremismo musulmán.
