Al menos 430 víctimas de la trata de personas han sido rescatadas de todo el mundo durante una operación internacional especial. La misión fue llevada a cabo por Interpol en coordinación con 47 países, incluido Emiratos Árabes Unidos.
La 'Operación Liberterra' de cinco días, que tuvo lugar entre el 5 y 9 de julio, dio lugar a la detención de 286 bandas criminales. También se detuvo a 4.000 inmigrantes irregulares. Los detalles de la operación, que contó con la participación de países auspiciados por Interpol, fueron revelados durante una conferencia de prensa virtual celebrada este lunes por Interpol en coordinación con el Ministerio del Interior de EAU.
Durante la operación se produjeron alrededor de 500.000 inspecciones en aduanas y aeropuertos así como en puntos de riesgo identificados por los servicios de inteligencia e investigación.
Además, la investigación permitió además rescatar a 430 personas víctimas del tráfico de personas e identificar a 4.000 migrantes en situación irregular originarios de 74 países. Muchos de ellos presentaban necesidades de asistencia médica, psicológica o domicilio y fueron asistidos por los servicios de protección. Entre las víctimas había menores y niñas que habían sufrido explotación sexual, especialmente en Líbano y Venezuela.
Interpol detalló que esta investigación ha permitido lanzar otras 60 pesquisas transnacionales y requisar documentos falsos utilizados para proponer a estas personas el traspaso de fronteras.
En Colombia, la operación sirvió para desmantelar dos organizaciones criminales distintas (22 arrestos), una de ellas dedicada a llevar cubanos y haitianos desde Ecuador a Colombia y otra para enviar migrantes a Estados Unidos.
La Operación Liberterra permitió también desmantelar una organización criminal en España que traficaba con migrantes procedentes de Argelia; una falsa agencia de viajes en Ecuador, donde hubo ocho arrestos, o un grupo de traficantes marítimos en Argelia.
"Los traficantes, centrados en los márgenes del beneficio, facilitaron el paso de los migrantes sin tener en cuenta su seguridad y bienestar", detalla Interpol en su nota.
Algunos fugitivos procedentes de Brasil, Colombia, Panamá y Curazao estaban siendo buscados además en asuntos de tráfico de drogas, violaciones, robos y blanqueo de dinero.
