Dado que Emiratos Árabes Unidos es un país desértico y el clima es típicamente cálido y soleado, las precipitaciones son poco frecuentes y no duran mucho tiempo. En su mayoría llueve durante la estación de invierno entre diciembre y marzo en forma de cortos aguaceros y tormentas ocasionales.
Sin embargo, a mediados de octubre del año pasado, durante el final del verano, se registraron lluvias en algunas partes del país, desde Mirdif, Hatta, Al Faqa y Mazyed hasta Masafi, Al Falah, Mohammed. Bin Zayed City y el área de Al Dhafra en Abu Dhabi, así como algunas partes en el norte de Emiratos. Los residentes han estado disfrutando del clima fresco y ocasionalmente lluvioso en Emiratos durante casi seis meses. Un "período de frío" más largo debido a las lluvias.
Pero ninguno podría ser más feliz que los científicos y meteorólogos del Centro Nacional de Meteorología (NCM). La reciente serie de aguaceros puede atribuirse al éxito de la siembra de nubes, un proceso para aumentar la cantidad de precipitación en el país de un 10 a un 30 por ciento, según un portavoz de NCM.
La lluvia, a través de la siembra de nubes lleva realizándose en Emiratos Árabes Unidos desde la década de 1990, lo que impulsa el suministro de agua del país y ayuda a mitigar su dependencia de la desalinización del agua de mar.
En una reciente columna de opinión publicada por Khaleej Times, Abdullah Ahmed Al Mandous, director del NCM, señaló que, según la ONU, casi la mitad de la población mundial podría enfrentar un alto estrés hídrico para 2030.
Esta es la razón por la que Emiratos Árabes Unidos ha estado colaborando con algunas de las principales instituciones mundiales para explorar cómo la investigación y el desarrollo podrían garantizar la seguridad del agua, explicó Al Mandous. "Casi tres décadas después de su trabajo inicial en la siembra de nubes (...) estamos orgullosos de continuar avanzando en la visión del liderazgo al aprovechar la siembra de nubes para la seguridad del agua", agregó.
En ese contexto, Al Mandous dijo que el NCM está desarrollando un modelo unificado que integra estudios de microfísica, química de la nube y propiedades eléctricas de la nube. Se espera que el modelo esté operativo a fines de 2020. "Este modelo mejorará la calidad de las operaciones de siembra de nubes y también brindará soluciones sostenibles a los desafíos que se presentan como consecuencia de la escasez de agua", subrayó.
Lo que comienza como lluvias moderadas puede terminar en fuertes aguaceros al final del día y las condiciones polvorientas pueden causar poca visibilidad y niebla, especialmente durante las horas punta de la mañana.
