martes. 23.04.2024

La canciller de Alemania, Angela Merkel, propondrá a los socios europeos el cierre de las negociaciones para la admisión de Turquía en la Unión Europea (UE), que de facto llevan meses suspendidas, después del debate electoral televisivo mantenido el domingo por la noche con su contrincante socialdemócrata, Martin Schulz. La tensión acumulada entre Alemania y Turquía, reavivada con la detención en cárceles turcas de ciudadanos turcoalemanes o de nacionalidad alemana, fue uno de los temas planteados por los presentadores del debate.

La lira turca y los bonos cayeron tras la declaración de Merkel.

Merkel –que ha sido acusada por algunos observadores de tibieza en ese tema con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan– se vio abocada a dejar clara su postura sobre Turquía después de que Schulz prometiese frenar la entrada de ese país en la UE si es elegido canciller.

“Está claro que Turquía no debe convertirse en miembro de la Unión Europea”, repuso Merkel entonces. “Las palabras de la canciller hablan por sí solas”, confirmó ayer su portavoz, Steffen Seibert, en su habitual rueda de prensa de los lunes en Berlín. Seibert recalcó que “en estos momentos Turquía no está en absoluto en condiciones para unirse a la Unión Europea; y de hecho, las negociaciones están ahora mismo inactivas”. En efecto, las laboriosas negociaciones para la adhesión, iniciadas en octubre del 2005, llevan meses en punto muerto debido a la evolución política en Turquía, que sus detractores consideran en plena deriva autoritaria.

El portavoz turco dijo que la canciller y Schulz dijeron lo mismo “y esto aviva la discriminación y el racismo”

A juicio de varios analistas, esas negociaciones paradas convienen en el fondo a ambas partes: Turquía tiene estatus de país candidato al ingreso y la UE puede decir que está negociando; y ambos mantienen abierta la comunicación.

Inevitablemente, Turquía reaccionó ayer con dureza a las frases de Merkel y Schulz. El portavoz de la presidencia turca, Ibrahim Kalin, lanzó una serie de nueve tuits, uno de los cuales decía: “Que la política mayoritaria alemana se arrodille ante el populismo y el afán de ver al otro como enemigo sólo aviva la discriminación y el racismo”. Mientras, el ministro de Asuntos Europeos turco, Omer Celik, dijo que toda conversación referente a liquidar las negociaciones del ingreso de su país en la UE constituye “un ataque a los principios fundacionales de Europa”.

Erdogan provocó escándalo en Alemania este verano al llamar a la ciudadanía alemana de origen turco a no votar ni a los a democristianos (Merkel) ni a los socialdemócratas (Schulz) en las próximas elecciones.

Coincidiendo con el torbellino, el Gobierno alemán confirmó ayer que uno de los doce alemanes detenidos “por razones políticas” en Turquía, arrestado la semana pasada, había sido puesto en libertad.

Las relaciones entre los dos países han sido tensas desde el fracaso del golpe del año pasado en Turquía y la fuerte condena de Berlín a Erdogan después de la represión subsiguiente que ha visto a más de 50.000 personas detenidas.

Merkel da por enterrado el ingreso de Turquía en la Unión Europea
Comentarios