jueves. 28.03.2024

La noche del 24 de diciembre también fue de atascos en numerosos puntos de Emiratos Árabes. Y en esta ocasión no para ver los fuegos artificiales sino para asistir a las misas de Nochebuena que tuvieron lugar en las iglesias católicas que existen en el país. Miles de personas de diferentes nacionalidades acudieron en masa a celebrar en los templos una de las jornadas más señaladas para todos los cristianos del mundo, la del aniversario del nacimiento de Jesús. La situación se repitió en Abu Dhabi y Dubai, pero también en otros puntos de Emiratos.

Fue el caso de Ras Al Khaimah, donde la celebración resultó verdaderamente multitudinaria. En la iglesia de San Antonio de Padua, ubicada en el polígono industrial de Al Hamra, se reunieron unas cuatro mil personas, en su mayoría de nacionalidad india. La nave central, con capacidad para dos mil personas, quedó literalmente desbordada. Y también el coro, donde se agolpaban cientos de feligreses. Hasta el punto de que los responsables del templo se vieron obligados a habilitar con pantallas los salones más amplios de las dependencias para dar cabida al aluvión de católicos que recibieron.

Y no sólo estaban hasta la bandera los distintos espacios del interior del templo, también el recinto exterior, donde otras cientos de personas participaban en las actividades que se desarrollaban y se hacían fotos junto a un gran árbol de Navidad y al Nacimiento. Para la ocasión, la iglesia fue envuelta por pequeñas luces blancas que hacían que su aspecto fuera insuperable.

El párroco, el padre Thomas Ampattukhuzi, vaticinó cuando fue inaugurado el templo el 14 de junio de 2013 que "se desbordará en muchas ocasiones". Y así lleva siendo desde hace cuatro años y medio. Señal inequívoca de que el catolicismo cobra cada día más fuerza en una tierra de aplastante mayoría musulmana. De hecho, la ratio de la que popularmente se habla en Ras Al Khaimah contempla que por cada diez viviendas hay una mezquita. Iglesias católicas hay dos, pero muy activas y con notable fuerza.

El sacerdote que ofició la misa, fray Ronelo R. Resco, dijo que "la Navidad es una festividad de todo el mundo", en la que "no importa de dónde vengamos o quiénes seamos". Asimismo animó a los presentes a seguir el ejemplo de Jesucristo. "La Navidad no es tiempo sólo para estar con familia, amigos y disfrutar de una buena cena, es un buen momento para pensar en el futuro y replantearnos cómo queremos vivir", subrayó. En las peticiones, lanzó especialmente mensajes de agradecimiento a los líderes de Emiratos Árabes y a su "muestra de tolerancia hacia todas las religiones".

Alrededor de la iglesia de San Antonio de Padua se estableció un servicio de seguridad, fundamentalmente para organizar el aparcamiento de miles de vehículos. Hubo un momento en que no fue posible estacionar más coches. Y los feligreses no sólo llegaron en automóvil sino que hubo muchísimos que lo hicieron andando, en bicicletas o en autobuses.

Idéntica situación se repitió en la catedral de San José de Abu Dhabi, que aglutina a una comunidad católica de más 100.000 personas, y en la iglesia de Santa María en Dubai, hasta donde miles de cristianos acudieron para celebrar la Nochebuena a pesar del tiempo desapacible y de los atascos circulatorios.

Miles y miles de católicos acuden a las misas de Nochebuena en Emiratos Árabes
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