Al menos una decena de personas, entre ellas dos niños, han muerto durante las últimas 24 horas por las súbitas inundaciones registradas en varias provincias de Yemen, según han informado fuentes locales.
Los torrentes de agua han azotado la capital, Saná, así como las provincias de Ibb, Lahj, Mareb y Shabwa.
También se tiene constancia de importantes daños materiales en viviendas, cultivos, automóviles y carreteras principales, que quedaron cortadas durante horas.
La temporada anual de lluvias en Yemen suele durar de abril a agosto con la particularidad desde hace siete años de que su llegada no hace sino agravar la situación humanitaria de la guerra en Yemen.
El país vive envuelto desde 2014 en una catastrófica lucha entre las fuerzas del Gobierno, apoyadas por una Coalición liderada por Arabia Saudita, y rebeldes hutíes vinculados a Irán.
La ONU considera el conflicto como un desastre humanitario que ha llevado al país al borde de la hambruna.
