El emir de Qatar, Sheikh Tamim, llegó a Kuwait este miércoles para mantener conversaciones con su homólogo e el país, Sheikh Sabah. El encuentro forma parte de los esfuerzos de mediación de Kuwait dirigidos a poner fin a la última crisis en erupción entre los tres miembros más poderosos del Consejo de Cooperación del Golfo.
Las tensiones entre Qatar y sus dos vecinos del Golfo, Arabia Saudita y Emiratos Árbes Unidos, aumentaron de forma considerable la semana pasada durante la visita de Donald Trump a Oriente Medio, después de que se divulgasen unas declaraciones atribuidas a Sheikh Tamim sobre Irán, que Qatar calificó como falsas poco después de hacerse públicas.
El episodio ha expuesto claramente las diferencias aún no resueltas entre Qatar y Arabia Saudita y EAU, en calma desde 2014. Entonces Riad y Abu Dhabi enviaron a sus embajadores de nuevo a Doha tras una ausencia de ocho meses después de que Sheikh Tamim acordase ratificar de nuevo un acuerdo con el GCC. En dicho acuerdo, Qatar se comprometía a no interferir en los asuntos internos de los Estados miembros y poner fin a cualquier apoyo a los partidos que amenazan la estabilidad de cualquier. Qatar también afirmó que había tomado una serie de medidas para reducir su apoyo a grupos islamistas en todo el mundo árabe.
Sin embargo, miembros del CCG y la nueva Casa Blanca de Estados Unidos no creen que Qatar siguiese adelante con sus promesas. Para el rey de Arabia el fortalecimiento de la amenaza iraní así como el surgimiento de ISIL es más apremiante. Sin embargo, Doha también comparte un interés fundamental en el campo de gas del Norte con Irán y no lo ven como una amenaza a su estabilidad interna.
Qatar ha llamado para el compromiso en lugar de la confrontación, una posición que ha enfurecido a Riad. Los supuestos comentarios de Sheikh Tamim, que aparecieron en los medios del estado de Qatar pero después fueron desmentidos, describían a Irán como una "fuerza importante para asegurar la estabilidad en la región", defendida por Hamas y Hezbolá.
Para Abu Dhabi, la preocupación por el apoyo de Qatar a islamistas nunca se disipa. Muchos observadores en el Golfo han depositado grandes esperanzas en la capacidad de Kuwait para negociar algún tipo de la distensión. "Si hay un país entre el CCG que es aceptable para todos y no tiene ningún problema con nadie, es Kuwait" dijo un observador basado en GCC al periódico The National.
