La esposa de un miembro de la realeza qatarí que languidece en una prisión de Doha hizo un llamamiento desesperado este lunes al Consejo de Derechos Humanos de la ONU con el fin de que liberen a su esposo.
El jeque Talal bin Abdul Al-Thani, nieto del ex emir Sheikh Ahmad bin Ali Al-Thani, lleva en prisión desde hace siete años.
Su esposa, Asma Arian, dice que ha sido torturado y maltratado por las autoridades de Qatar y se le ha negado atención médica a medida que su salud se deteriora.
La mujer pronunció una declaración al Consejo con sede en Ginebra sobre un informe del Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria en Qatar, que lo visitó el año pasado.
“Ha estado detenido arbitrariamente en Qatar durante más de siete años, años de sufrimiento para nuestros hijos y para mí, y tortura y desesperación para él”, dijo Arian, que vive en Alemania con sus cuatro hijos.
“Está detenido en régimen de incomunicación y padece las graves condiciones médicas que desarrolló en prisión. Mi esposo necesita atención médica urgente y un abogado que elija libremente".
Arian dice que su esposo fue detenido en 2013 después de que solicitó su herencia al Gobierno. Aclaró que el jeque Talal fue engañado para que firmara controles de seguridad que, según dijo, respaldarían proyectos comerciales a través de los cuales se le pagaría.
“Esos proyectos resultaron ficticios, diseñados para atrapar a mi esposo en acusaciones fabricadas de incumplimiento de deudas”, explicó la esposa.
Fue condenado a 22 años de prisión sin un juicio adecuado.
El informe del grupo de trabajo de la ONU criticó explícitamente a Doha por encarcelar a un gran número de personas por incumplir el pago de deudas y el uso de "cheques de garantía" para garantizar préstamos.
“Hacemos un llamado a Qatar para que cumpla con las recomendaciones del grupo de trabajo y libere a mi esposo de inmediato y respete sus derechos mientras está detenido”, subrayó Arian.
El informe formuló una serie de recomendaciones para Qatar, como subir la edad mínima de responsabilidad penal a 14 años y la abolición del sistema de tutela masculina sobre la mujer.
Según informa el portal Arab News, la difícil situación del jeque Talal se ha relacionado con décadas de luchas internas dentro de la familia real de Qatar.
Su abuelo, que reinó desde 1960 hasta 1972, fue depuesto por su primo el jeque Khalifa bin Hamad, abuelo del actual emir de Qatar, el jeque Tamim.
