El gobierno de Yemen ha instado a Estados Unidos a designar a los hutíes como una organización terrorista extranjera, citando el historial de derechos humanos de los rebeldes respaldados por Irán.
El ministro de Información, Muammar Al Iryani, dijo el miércoles por la noche que los crímenes cometidos por algunos miembros del grupo hutí equivalen a crímenes de guerra.
"Desde el inicio de la guerra, los rebeldes Houthi han movilizado a una generación de jóvenes yemeníes, en áreas que están bajo su control, con terror e ideologías agresivas", dijo Al Iryani durante una reunión con el Embajador de Estados Unidos en Yemen, Mathew Tueller.
El ministro mencionó que los abusos cometidos por Houthi contra civiles abarcaban desde violaciones, torturas hasta desapariciones y agregó que no creía que los rebeldes tomaran en serio la búsqueda de una solución pacífica al conflicto en curso.
Tanto el gobierno de Trump como el de Obama han examinado el tema en cuestión, pero ambos no han sido concluyentes.
Los expertos han advertido previamente que esto podría complicar los esfuerzos de la ONU para presionar por una solución política.
Designar al grupo como una organización terrorista podría resultar en la congelación de los activos de sus miembros, así como en las restricciones de viaje y otras sanciones contra los sospechosos de apoyar al grupo.
La petición se produce mientras los representantes de Houthi se reunen con funcionarios europeos en Bruselas.
Abdel Malik Al Ajri, representante de los rebeldes, dijo que las discusiones con la ONU celebradas este jueves se centraron en la crisis humanitaria y política de Yemen y la reapertura del aeropuerto de Saná.
El aeropuerto se cerró al tráfico comercial en 2016, lo que dejó a miles de yemeníes sin una forma práctica de salir del país. Cualquier reapertura requeriría un acuerdo entre las partes en conflicto de Yemen.
