Medios de comunicación iraníes informaron hoy que el petrolero noruego Front Alter fue hundido este jueves en el Golfo de Omán. Sin embargo, un periódico noruego pudo confirmar que la nave estaba ardiendo en la citada zona y permanecía a flote.
Este hecho quedó posteriormente constatado por las imágenes del buque en llamas y a la deriva difundidas por Estados Unidos.
El petrolero es uno de los atacados esta mañana en el Golfo de Omán, cerca del estratégico Estrecho de Ormuz, según la Armada de Estados Unidos.
El Ministerio de Comercio de Japón informó que los petroleros atacados cerca del Estrecho de Ormuz transportaban "carga relacionada con Japón".
Los precios del petróleo se dispararon alrededor de un cuatro por ciento este jueves después de los informes sobre el "ataque".
Las tripulaciones de los petroleros atacados fueron evacuadas, según informaron las compañías navieras. Este incidente se produce un mes después de otro similar en el que fueron atacados cuatro petroleros en la región.
La Quinta Flota de la Armada de Estados Unidos, con sede en Bahréin, informó que estaba ayudando a los petroleros después de recibir llamadas de emergencia tras los ataques.
Responsables del Departamente de Operaciones de Comercio Marítimo del Reino Unido, que forma parte de la Royal Navy, señalaron que están investigando el suceso.
Según informa la agencia de noticias Reuters, los detalles del incidente no están claros, pero un operario dijo que sospechaba que su barco había sido alcanzado por un torpedo. La otra empresa naviera dijo que su embarcación estaba en llamas en el Golfo de Omán.
El Golfo de Omán se encuentra a la entrada del Estrecho de Ormuz, una importante vía marítima estratégica a través de la cual una quinta parte del consumo mundial de petróleo pasa de los productores de Medio Oriente.
No hubo confirmación inmediata por parte de las autoridades de Omán o Emiratos Árabes Unidos, en cuyas aguas territoriales cuatro petroleros fueron atacados el mes pasado.
Una investigación dijo que se utilizaron minas de lapa. Funcionarios de Estados Unidos y Arabia Saudita culparon a Irán por el ataque de mayo, un cargo que Teherán negó.
En relación con el incidente de este jueves, el armador Bernhard Schulte declaró que el petrolero Kokuka Courageous, con bandera de Panamá, resultó dañado en un "presunto ataque" que rompió el casco por encima de la línea de agua mientras se encontraba realizando la ruta de Arabia Saudita a Singapur. "El barco está a salvo", dijo en un comunicado.
Por su parte, el petrolero Front Altair, que transportaba 75.000 toneladas de nafta, se sospecha que ha sido "golpeado por un torpedo" alrededor de las 04.00 hora GMT.
La embarcación, propiedad de una empresa de Noruega, había cargado nafta, una materia prima petroquímica, en Ruwais de Abu Dhabi en EAU y se dirigía a Taiwan, según las fuentes comerciales. Frontline dijo que su embarcación estaba en llamas en el Golfo de Omán.
Las fuentes dijeron que las tripulaciones de ambos buques resultaron atacadas en aguas internacionales y fueron evacuadas de manera segura.
Un agente de transporte afirmó que se había producido una explosión "sospechosa de un ataque externo" que puede haber involucrado una mina magnética en el Kokuka.
