viernes. 29.03.2024

Fatima Salem se ríe con vacilación cuando es su turno de conducir a través de un pequeño estacionamiento lleno de conos de color naranja brillante.

Al igual que millones de mujeres sauditas, piensa solicitar una licencia de conducir cuando el Reino levante su prohibición en junio. Pero primero, ella tiene que aprender a conducir. "Estoy un poco nerviosa", dijo la estudiante de un máster de 30 años.

Francesca Pardini, una ex piloto italiana de autos de carrera, ayuda a calmar sus nervios, recordándole a Salem que revise los espejos y se abroche el cinturón de seguridad.

Un decreto real emitido el año pasado por el rey Salman anunciando que a las mujeres se les permitiría conducir en 2018, puso fin a esta prohibición.

El príncipe heredero Mohammad Bin Salman ha impulsado una serie de otras reformas para relajar algunas de las reglas ultraconservadoras del país, como permitir que las mujeres entren a estadios para asistir a las competiciones deportivas, acudan a conciertos musicales y prometer el regreso de cines este mes después de más de tres décadas de prohibición.

Las mujeres sauditas toman el volante por primera vez para aprender a conducir
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