Los rebeldes hutíes de Yemen expulsaron a unas 150 familias de sus hogares en la provincia de Taez, amenazando con matar a aquellos que no cumplieran sus órdenes, según publicó este jueves el diario The National.
Las familias fueron obligadas a abandonar sus hogares el pasado martes en la zona rural de Haifan, Al Silw y Hithran, áreas que las fuerzas gubernamentales han intentado recuperar desde que la provincia cayera en manos de los rebeldes y sus aliados en abril del año pasado.
"Los hutíes suelen expulsar a las personas para plantar minas terrestres", dijo un líder de la resistencia popular en la provincia de Taez.
Asimismo dijo que "esta no era la primera vez que los hutíes expulsaban a la gente de sus casas".
El activista social Naseem Al Odaini señaló que los hutíes "amenazaron con matar" a las familias que no salieran de sus casas antes de la puesta de sol y "detuvieron a 17 personas que se negaron".
En este sentido, apuntó que "la mayoría de las familias no saben a dónde ir y huyen a la ciudad y otras zonas rurales".
Al Odaini cree que los hutíes están planeando plantar minas terrestres en el pueblo, ya que se encuentra dentro de la zona de conflicto.
Los expulsados en estos casos son mujeres y niños. Los hombres se encuentran en su mayoría encerrados en las cárceles de los hutíes o han escapado.
Emiratos Árabes Unidos entregó el pasado miércoles su cuarto envío de repuestos y filtros a la ciudad portuarua de Mukalla, en el sur, con el objetivo de aliviar la carga de los ciudadanos, que tienen que soportar cortes periódicos de electricidad.
