Al menos tres personas han muerto y varias resultaron heridas en un tiroteo en la ciudad holandesa de Utrecht cuando un hombre abrió fuego dentro de un tranvía la mañana de este lunes. La policía ha informado de que el suceso ha tenido lugar a las 10.30 (13.30 hora en EAU) cerca de la plaza 24 de Octubre, situada en un barrio residencial fuera del centro de la ciudad. La policía ha activado una operación de busca y captura del sospechoso, que se encuentra huido.
La zona ha sido acordonada y se han desplazado varios vehículos de los servicios de emergencia, incluidos helicópteros médicos y ambulancias. Las unidades antiterroristas también se han desplegado en el lugar, ya que la policía contempla “un posible motivo terrorista” detrás el ataque. Las autoridades holandesas han elevado la alerta terrorista a su máximo nivel en la provincia de Utrecht, según informó la oficina antiterrorista holandesa.
“Se dispararon varios tiros en un tranvía y varias personas resultaron heridas. Hay helicópteros en la escena y no se han realizado arrestos”, afirmó el portavoz de la policía, Joost Lanshage. El autor se encuentra huido. “Una de las explicaciones es que huyera en coche”, dijo otro portavoz de la policía, Bernhard Jens. Las autoridades buscan un Renault Clio rojo.
El jefe de la agencia antiterrorista del país, Pieter-Jaap Aalbersberg, dijo en rueda de prensa que se registraron tiroteos en “varios lugares” de la ciudad. “Mucho no está claro en este momento y las autoridades locales están trabajando arduamente para establecer todos los hechos”.
Un dispositivo policial con agentes fuertemente armados se ha desplegado frente a un edificio situado en Kanaleneiland, cerca del lugar del tiroteo y donde se cree que podría estar escondido el sospechoso. Además, medios locales informan de que también se ha llevado a cabo una redada en el distrito de Pijlsweerd.
La policía de Utrecht ha publicado la imagen de un hombre de nacionalidad turca de 37 años identificado como Gökmen Tanis. No confirma que se trate del atacante, pero si lo relaciona con los incidentes de esta mañana y pide a la población que tenga cuidado con él y que si alguien lo ve, no se acerque y llame inmediatamente a la policía.
Imágenes difundidas en las redes mostraban la actividad policial en la comisaría Marco Pololaan, situada a dos calles de la plaza 24 de octubre.
El Ayuntamiento de Utrecht ha recomendado a los ciudadanos que se queden en sus casas, mientras que la policía ha ordenado el cierre de las escuelas de la ciudad, con los alumnos dentro, a la espera de dar por concluida la operación. También se ha reforzado la seguridad en aeropuertos y otras infraestructuras, así como en mezquitas.
Varios testigos han señalado que hay más de una persona implicada en el tiroteo, aunque por ahora la Policía solo confirma un atacante. La emisora de radio local RTV Utrecht citó a un testigo diciendo que había visto a una mujer que quedó tendida en el suelo tras algún tipo de confrontación y varios hombres escaparon de la escena.
El primer ministro neerlandés, Mark Rutte, ha cancelado una reunión que tenía con los partidos de la coalición por esta “situación inquietante” y ha advertido de que el Gobierno “está muy preocupado”. Por su parte, el alcalde de Utrecht, Jan van Zanen, apunta que “lo más importante en este momento es atender a los heridos e investigar las circunstancias del incidente”.
Por su parte, la policía alemana ha informado de que ha aumentado la vigilancia en su frontera con los Países Bajos. Heinrich Onstein, portavoz de la policía federal en el estado fronterizo de Renania del Norte-Westfalia, dijo a The Associated Press que se habían agregado más policías para vigilar no solo las autopistas principales, sino también los cruces menores, así como las rutas ferroviarias. Han confirmado que tienen una descripción del sospechoso, Gökmen Tanis y que las autoridades holandesas les habían pedido, en un inicio, que buscaran un Renault Clio de color rojo, pero que posteriormente les comunicaron que ya habían encontrado el vehículo abandonado en la ciudad de Utrecht, un aspecto que no confirmado por la policía holandesa.
