viernes. 19.04.2024

Una imagen de Nasoin Akhter de 15 años el día de su boda fue captada por la fotógrafo Allison Joyce, que manifestó que la menor parecía especialmente melancólica el día de su matrimonio con Mohammad Hasamur Rahman de 32 años, la semana pasada en Manikganj, Bangladesh.

"Es una tradición que la novia se muestre tímida durante la boda", explicó Joyce al diario The Washington Post en un correo electrónico. "Pero me di cuenta de esa tristeza, el miedo y la incertidumbre, incluso cuando ella estaba en su cuarto con sus amigas antes de la ceremonia o en el salón con su hermana".

Aunque el matrimonio de Nasoin Akhter es técnicamente ilegal en Bangladesh, las leyes en contra del matrimonio infantil rara vez se aplican. Y a pesar de lo que los funcionarios del gobierno prometen cumplir la normativa, la práctica sigue siendo muy popular en Bangladesh.

De acuerdo con un informe publicado en junio por Human Rights Watch, el país tiene la cuarta tasa más alta de matrimonio infantil del mundo, con el 29 por ciento de las niñas de Bangladesh casadas antes de cumplir los 15 años y el 65 por ciento antes de los 18.

"El matrimonio infantil conlleva entre otros peligros problemas de salud, asociados con el embarazo precoz, menor rendimiento escolar de las niñas que se casan antes, una mayor incidencia de la violencia conyugal y un aumento de la probabilidad de pobreza. Los datos globales muestran que las niñas de las familias más pobres tienen el doble de probabilidades de casarse antes de los 18 años que las niñas con mayor nivel adquisitivo", señala el informe.

La pobreza, la tradición, el acoso sexual de las muchachas solteras y el acceso limitado a la educación impulsan la práctica y convencen a los padres de que están haciendo lo mejor para sus hijas. En Instagram, Joyce escribió que Nasoin Akhter era la "novia más triste que he visto".

Y la fotógrafo comentó al periódico que lo más sorprendente de la boda de Akhter era que su familia no era pobre, su padre "es un rico hombre de negocios con múltiples casas de dos pisos".

A pesar de que Bangladesh ha reducido la pobreza y la mortalidad materna, logrado la paridad de género en la matrícula escolar primaria y secundaria y está mejorando en los derechos de las mujeres, todavía debe luchar para terminar con el matrimonio infantil, de acuerdo a Human Rights Watch.

El plan propuesto por el gobierno de Bangladesh para hacer frente a este problema ha aumentado la conciencia, pero a nivel local, la "complicidad generalizada" por parte de los funcionarios facilitan muchos matrimonios de menores.

 

Retrato de la "novia más triste"
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