Los atacantes que asaltaron esta mañana una iglesia y degollaron a un cura en la localidad francesa de Saint-Etienne-du-Rouvray gritaron su pertenencia al grupo terrorista Estado Islámico (ISIS en sus siglas en inglés), según ha informado el presidente francés Francois Hollande. La Fiscalía Antiterrorista de París ha asumido la investigación.
El párroco fallecido se llamaba Jacques Hamel y tenía 84 años, según ha informado el arzobispo de Rouen, Dominique Lebrum. Una mujero, otra de las cinco personas que fueron tomadas como rehenes durante el asalto al templo se encuentra en estado crítico, tras ser atacada también con un arma blanca.
Los otros tres rehenes fueron liberados sanos y salvos tras una hora de reclusión, gracias a la intervención del cuerpo de élite de la policía francesa, la Brigada de Investigación e Intervención, que mató a los dos secuestradores que habían irrumpido en la iglesia armados con cuchillos cuando faltaban pocos minutos para las diez de la mañana.
El presidente francés, François Hollande, ha realizado una intervención pública en la que ha culpabilizado al Estado islámico del ataque: "El IS nos ha declarado la guerra y debemos librarla", ha dicho el presidente, que se trasladó de inmediato al lugar de los hechos.
Uno de los terroristas es un joven natural de Saint-Etienne-du-Rouvray, que trató de viajar a Siria el 15 de mayo del año pasado, pero fue devuelto por las autoridades turcas, según ha informado la cadena francesa de noticias Itele.
Este individuo, según la misma fuente, fue procesado en Francia a su regreso por el delito de asociación terrorista. El pasado 22 de marzo salió en libertad condicional pero controlado con una pulsera electrónica. La Fiscalía recurrió sin éxito la decisión del juez de sacarlo de la prisión preventiva.
