¿Es posible sentir pena por la muerte de alguien que nunca has visto en la vida, ni siquiera en fotografías? Es posible. Acabo de enterarme del fallecimiento del músico mexicano Celso Piña, de quien realmente caigo en cuenta no sabía mucho, ni siquiera conocía su figura. Me vengo a enterar por el artículo de prensa, no solo sobre la muerte del señor Piña, QEPD, sino también sobre su vida, que resulta tan interesante y tan cercana a los colombianos.
Sin embargo, a pesar de mi ignorancia sobre el músico mexicano, había escrito anteriormente sobre Piña, como referencia, en el libro de mi autoría, 'Colombia en el cine universal'. La caza de citas, publicado en el año 2011, el cual se refiere a menciones de Colombia o colombianos en más de 300 películas extranjeras, un ejercicio tan interesante como masoquista y justamente una de las referencias es un estribillo que me llamó la atención en la película 'Babel' del director Alejandro González Iñárritu, en donde el nombre Ronda Bogotá se escucha claramente como fondo musical.
La Ronda Bogotá es el nombre del grupo musical que Celso Piña fundó, tomando la cumbia y el vallenato colombianos para mezclarlos con ritmos de México, creando un sonido muy particular.
La identificación de la agrupación es una clara la referencia a la ciudad capital de Colombia y lo inventó el padre del artista mexicano.
Celso Piña y sus hermanos crecieron en Monterrey, escuchando melodías colombianas de cumbia y vallenato que llegaron a la ciudad en grabaciones esporádicas, fue tal el gusto por esos géneros musicales que su padre le regaló un acordeón que aprendió a tocar de oído, de forma autodidacta. De esta manera empezó una carrera, primero interpretando aquellos clásicos colombianos que le habían impactado en su juventud y luego mezclando las melodías caribeñas con los ritmos de lo que se denomina la “música regional mexicana”, como la norteña, pero incluso innovando con géneros mucho más modernos como el hip hop o el ska. No en vano se le conoció como el “rebelde del acordeón”. Realizó grabaciones con los más variados artistas, siendo muy querido en el medio musical.
Celso Piña y su Ronda Bogotá, alcanzaron un gran éxito en diversas partes del mundo. Curiosamente en Colombia, el Maestro Piña no fue tan popular, pero ahora que ha fallecido, sea el momento para hacer un reconocimiento a su amor por la música colombiana y la manera como ayudó a difundirla en el exterior. Puedo dar testimonio que los acordes de la Ronda Bogotá, los he escuchado en sitios inverosímiles, como caminando por una calle de Honolulu, mientras en el horizonte las olas del mar se mecían, bailando la cumbia seguramente.
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Dixon Moya es diplomático colombiano de carrera, escritor por vocación, lleva un blog en el periódico colombiano El Espectador con sus apellidos literarios, en el cual escribe de todo un poco: http://blogs.elespectador.com/lineas-de-arena/ En Twitter a ratos trina como @dixonmedellin