martes. 19.03.2024

Día por la paz

"Está en cada uno de nosotros el poder cambiar aquello que no nos gusta a través de la acción, el involucrarse, el apoyarse en el otro para que sigamos evolucionando con el objetivo de conseguir un mundo sano y en paz"

Antes de comenzar a hacer conciencia de mi poder, del control que tengo sobre mi vida, de todo lo que puedo hacer y aportar en mi propio beneficio y en el del Universo, vivía la vida con el foco puesto en aquello que no tenía, que me faltaba o que no lograba, vivía condicionada por mis miedos y mis propios límites. 

Cuando en mi vida me encontraba con cosas que no me gustaban o con resultados que no esperaba, buscaba culpables; culpaba a la vida por no darme lo que yo esperaba y quería. Entendí en el momento en el que me adentré en el autoconocimiento y el desarrollo personal, que la palabra culpa es muy tóxica y la comencé a reemplazar por responsabilidad; yo era responsable en parte de lo que me pasaba en la vida, yo era colaboradora de lo que me sucedía. Veo a gente por diferentes lados que ven la televisión y se quejan de lo que sucede en el mundo, como si ellos no pudieran hacer nada al respecto, como si la cosa fuera con otros. No señores, la cosa va con todos nosotros. No podemos permitirnos pasar una vida pasivos ante lo que sucede en el mundo y que lo único que hagamos sea quejarnos. Tenemos que tomar las riendas de nuestra vida y empezar a ser protagonistas, no la víctima del filme. Hay que comenzar a tomar acción. El mundo nos necesita.

Está en cada uno de nosotros el poder cambiar aquello que no nos gusta a través de la acción, el involucrarse, el apoyarse en el otro para que sigamos evolucionando con el objetivo de conseguir un mundo sano y en paz. Como dijo tan sabiamente Ghandi, “debes ser el cambio que quieres ver en el mundo”.

Creo que todos tenemos un propósito; un propósito es algo que sirve a la humanidad, que nace del corazón y tiene que ver con aquello que nos apasiona, con nuestro talento. El mío en estos momentos es escribir sobre la importancia del autoconocimiento, del desarrollo personal, vivir en aceptación, aquí y ahora, con control sobre nuestro cuerpo y nuestra mente, responsable de lo que nos sucede y disfrutando con bienestar las actividades cotidianas.

Si tienes algo que decir, ¿a qué esperas? Pon tu grano de arena, tu vida no va a mejorar mientras permaneces pasivo a lo que sucede a tu alrededor, observando y mirando cómo otros crecen y evolucionan. JUNTOS SOMOS MÁS. La competitividad desde mi punto de vista no lleva a nada, lo que sí lo hace es el espíritu de superación y el servir a la comunidad. No tengas miedo, cuanto más agradecidos somos más abundancia nos manda el universo, cuando más damos, más somos.

Hoy, concretamente, quiero hablar de involucrarnos con dos objetivos; la inclusión de las personas que no tienen nuestra misma capacidad, que no tienen las mismas habilidades, que no tienen nuestros mismos recursos. Somos uno en esencia aunque hayamos venido a este mundo con diferente forma. Hoy estás aquí y mañana vas a estar allí. Lo digo porque en la vida pasan cosas, porque cuando nacemos dependemos de nuestros padres y cuando nos hacemos mayores volvemos a depender de alguna manera. Nuestra habilidad y capacidad llegan a su punto culmen cuando nos entregamos a nuestro propósito, a servir al otro. Quizá, el tuyo - tu propósito- esté relacionado con ayudar a personas que ahora mismo no tienen los mismos recursos que tú, la misma capacidad que tú, a dar lo mejor de sí mismas, a que también contribuyan a ese efecto cadena que hace milagros. Y, en segundo lugar, no podemos esperar nada bueno si seguimos dañando a la Madre Tierra, ¿qué mayor daño nos estamos haciendo a nosotros mismos que cuando maltratamos a la fuente que nos da la energía para existir? Luego vienen enfermedades, fuegos, guerra. ¿Y qué esperamos si no hacemos nada por cambiarlo? Toneladas de basura que van a parar a nuestros océanos, a la Tierra, que contaminan. Hay que empezar a informarse de las medidas que podemos tomar cada uno individualmente para contribuir a la causa, tomar conocimiento y empezar a ponerlo en práctica. En esa contribución y en este servir a la humanidad se haya nuestra verdadera felicidad.

Atención: Este texto está escrito de acuerdo con las experiencias de vida de la fundadora de DETRIBU y con lo que ella ha conocido, puede haber diferentes visiones sobre un mismo tema dependiendo de las vivencias de las personas. Todas se respetan y se escuchan.

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