Un comando con al menos cuatro hombres, presuntamente del grupo yihadista Daesh, atacaron este lunes la Embajada de Irak en Kabul, capital de Afganistán, donde primero un terrorista detonó los explosivos que portaba, abriendo el paso hacia el interior a otros tres, que iniciaron un tiroteo con las fuerzas de seguridad.
"Hay un ataque terrorista contra la Embajada de Irak", afirmó a Efe el portavoz del Ministerio de Interior afgano, Najib Danish, que aclaró que los empleados de la legación iraquí "fueron evacuados a un lugar secreto y seguro", por lo que "no existe una amenaza seria a su seguridad".
Una comisaría también ha resultado afectada por la explosión, informa Reuters. De momento no hay información disponible sobre las posibles víctimas de la explosión.
El canal afgano TOLO News ha informado de otra explosión que ha tenido lugar poco después de la inmolación del suicida.
Algunos testigos también afirman que han oído dos explosiones cerca de la Embajada iraquí y que una parte del edificio ha resultado dañada en el ataque.
El ataque se produce una semana después de que al menos 35 personas murieron en un ataque suicida contra trabajadores del gobierno en Kabul y subraya la precaria seguridad en Afganistán, mientras la administración estadounidense considera una revisión de su política en la región.
El ataque de la semana pasada fue reclamado por los talibanes. Por el momento, se desconocen la víctimas del suceso de este lunes.
