La inteligencia de Estados Unidos obtuvo información de que Irán planeaba atacar a las fuerzas estadounidenses en Oriente Medio, lo que movió a Washington a aumentar su presencia militar en la región, escribe The Wall Street Journal citando a funcionarios estadounidenses.
Según las fuentes, los servicios de inteligencia estadounidenses descubrieron que Irán "planeaba atacar a las fuerzas estadounidenses en Irak y, posiblemente, en Siria, así como organizar ataques en el estrecho de Bab al Mandeb cerca de Yemen gracias a las fuerzas bajo su control" en esa zona.
Además, Irán presuntamente buscaba atacar a militares de EEUU en Kuwait y también, con drones armados, en el Golfo Arábigo.
Las fuentes del periódico afirman haber quedado sorprendidos "por mayor detalle de los planes iraníes y el hecho de que se mencione a los estadounidenses como posible blanco".
Según fuentes militares, el jefe del Mando Central de EUUU, general Kenneth McKenzie, solicitó fuerzas militares adicionales luego de recibir datos de inteligencia sobre la amenaza a las fuerzas estadounidenses. En respuesta a la solicitud, la Administración de EEUU enviará a la región un grupo de combate aéreo, unos seis cazas, y, con menos probabilidad, sistemas antiaéreos Patriot.
La semana pasada, el asesor de seguridad nacional del presidente de Estados Unidos, John Bolton, declaró que su país mandó el portaviones Abraham Lincoln y varios bombarderos a las costas de Irán en calidad de "señal clara e inequívoca" de que cualquier ataque contra los intereses estadounidenses o de sus aliados en la región se enfrentaría "con una fuerza implacable".
A mediados de abril, el presidente de EEUU, Donald Trump, anunció la decisión de designar al Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán (CGRI) como una organización terrorista.
En respuesta, el Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán catalogó como organización terrorista al Mando Central de EEUU (Centcom) y designó país patrocinador del terrorismo al propio Estado norteamericano
