El Ejército de Estados Unidos ha acusado a Irán de hacer pruebas con cohetes en el estrecho de Ormuz al paso de buques de guerra que participan en la lucha contra el grupo Estado Islámico, informa el diario The National.
Buques de guerra iraníes llevaron a cabo pruebas con cohetes la semana pasada cerca de los buques de guerra de Estados Unidos y del tráfico comercial que transita por el Estrecho de Ormuz, según ha explicado el Ejército estadounidense este miércoles. El incidente ha provocado nuevas tensiones entre los dos países después del acuerdo nuclear de hace tan sólo unos meses.
El vital estrecho, un canal entre Irán y Omán situado a 20 kilómetros del emirato de Ras Al Khaimah (EAU) por el que pasa casi un tercio del petróleo transportado por mar, es crucial para los barcos que participan en la guerra contra el grupo Estado Islámico en Irak y Siria.
Aunque Estados Unidos se ha quejado antes sobre otras maniobras militares iraníes en la zona, el incidente del sábado se produce después de una serie de pruebas de armas y otras operaciones de la república islámica.
Los medios iraníes no informaron en un primer momento sobre el incidente.
Barcos de la Guardia Revolucionaria iraní dispararon "varios cohetes no dirigidos" a unos 1.370 metros del portaaviones estadounidense Harry S. Truman, el destructor Bulkeley y de una fragata francesa, la Provence, según ha indicado en un comunicado el comodoro Kylle Raines, portavoz del Mando Central de Estados Unidos. También había embarcaciones comerciales en la zona.
Los barcos iraníes anunciaron por radio un ejercicio con munición real con sólo 23 minutos de antelación, señaló Raines.
"Estas acciones fueron muy provocadoras", consta en el comunicado. "Disparar armas tan cerca de los barcos de la coalición que pasaba y del tráfico comercial dentro de una línea de tráfico marítimo reconocida de forma internacional es poco seguro, poco profesional e inconsistente con el derecho marítimo internacional".
El incidente se produjo después de que Irán y varias potencias mundiales lideradas por Estados Unidos accedieran a un acuerdo nuclear histórico para limitar el enriquecimiento de uranio de la república islámica a cambio de levantar sanciones económicas. Aunque celebrado por los moderados en irán, los más conservadores han criticado el acuerdo.
Desde que se firmó el pacto, Irán ha realizado pruebas de misiles criticadas por Washington y difundido imágenes en la televisión estatal de una base subterránea de misiles.
