Dentro de su estrategia a 2030, que establece el crecimiento y expansión internacional de la compañía, Cepsa ha iniciado su actividad de 'trading' en Asia. Para ello, la compañía ha abierto su primera sede externa de este negocio, que hasta ahora gestionaba todas sus operaciones desde su sede central en Madrid. En concreto, ha puesto en marcha una nueva oficina en Singapur, el mayor centro financiero de la región, desde la cual podrá acceder a nuevos mercados, clientes y productos, así como ampliar sus sinergias con Mubadala.
La compañía ha comenzado ya su actividad de 'trading' en esta región, en concreto, ha realizado varias operaciones de venta de nafta producida en su Refinería La Rábida, situada en la provincia de Huelva (España). Asimismo, la compañía está trabajando en las primeras operaciones de venta del crudo.
A través de estas operaciones, la compañía prevé optimizar la comercialización del crudo que produce en los campos SARB y Umm Lulu, situados en aguas someras frente a la costa de Abu Dhabi.
Igualmente persigue lograr nuevas oportunidades para los productos fabricados en las refinerías de la compañía en España.
Durante los próximos días, Cepsa participa por primera vez como empresa local en APPEC 2019 (Asia Pacific Petroleum Conference), uno de los foros más relevantes del sector del petróleo en la región Asia-Pacífico, que se celebra en Singapur del 9 al 11 de septiembre, y en el que se dan cita 'traders' de todo el mundo.
Para Alfonso Mingarro, director de Trading de Cepsa, “la apertura de la sede en Singapur supone un hito para Cepsa, ya que nos permite expandir nuestro negocio de 'trading' en esta región, al tiempo que podemos optimizar la actividad de otros negocios de la compañía en este creciente mercado”.
INTERNACIONALIZACIÓN
Ha sido el primer paso, pero Cepsa quiere continuar expandiendo su negocio de 'trading': la compañía tiene previsto abrir una nueva sede en Houston (Estados Unidos) a lo largo de 2020 para ampliar su actividad en el mercado americano.
El negocio de 'trading' constituye una palanca imprescindible para la internacionalización de Cepsa.
Además de generar valor para la compañía, se trata de un negocio fundamental para la optimización de otras actividades de Cepsa.
En 2018, este negocio gestionó más de 1.300 fletamentos de buques y abasteció al negocio de refino de la compañía con cerca de 160 millones de barriles de crudo provenientes de todo el mundo, especialmente de África Occidental y Oriente Medio.
