jueves. 28.03.2024

La imposición de un impuesto sobre las remesas y los ingresos de los expatriados en el Golfo Arábigo dará lugar a consecuencias negativas, ya que los extranjeros representan el 90 por ciento de la fuerza laboral del sector privado de la región, advirtió el Fondo Monetario Internacional (FMI).

La propuesta de aplicación de un impuesto del 5 por ciento, que se examina en varios países del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), se traduciría en un 0,3 por ciento (4.200 millones de dólares) del ingreso marginal del PIB de la región, según informó el portal Arabian Business.

El total de las remesas de los países del CCG es de 84.400 millones de dólares al año, según el FMI.

La organización añadió que el impuesto se traduciría en costes administrativos y operativos que pueden reducir los ingresos y la competitividad en el sector privado.

Añadió que los ingresos de los expatriados en el CCG se reduciría si se impone un impuesto de este tipo, debido al hecho de que los trabajadores no cualificados constituyen el 80 por ciento de la plantilla total de expatriados en el CCG.

El impuesto también convertiría a la región en un destino de trabajo no favorable para los empresarios expatriados, quienes buscarían oportunidades en otros lugares, concluyó el FMI.

El impuesto a las remesas de los expatriados traería "consecuencias negativas"
Comentarios