Emiratos Árabes Unidos a condenado el atentado terrorista que tuvo lugar el domingo en el centro de El Cairo y que causó la muerte de unas 20 personas frente a un hospital oncológico en la capital egipcia.
En una declaración, el Ministerio de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional manifestó que "este atroz acto de terrorismo está completamente en contra de todos los valores y principios religiosos y humanitarios".
Asimismo, el Ministerio expresó las condolencias de EAU a las familias de las víctimas, al tiempo que deseaba una pronta recuperación de los heridos que deja este un criminal que "tiene como objetivo socavar la seguridad y la estabilidad de Egipto".
El Ministerio renovó la posición de EAU contra el terrorismo, independientemente de sus fuentes y motivos.
La explosión se produjo el domingo por la noche en el concurrido bulevar Corniche a lo largo del río Nilo. Dañó el principal hospital oncológico de Egipto cercano, destrozando partes de la fachada y algunas habitaciones del interior, lo que obligó a evacuar a docenas de pacientes.
Fue el ataque más mortífero en la capital egipcia en más de dos años.
Las autoridades habían dicho inicialmente que la explosión fue causada por un accidente de varios vehículos. Pero más tarde, el lunes, el Ministerio del Interior reconoció que se trataba de un coche bomba.
Acusó a un grupo militante conocido como Hasm, que tiene vínculos con los ilegales Hermanos Musulmanes, diciendo que estaba trasladando el coche para llevar a cabo un ataque en otro lugar.
El Ministerio no informó cuál era el objetivo deseado. El coche había sido robado meses antes en el Delta del Nilo, dijo.
