El mercado halal está de moda en España. Si Córdoba acogía la pasada semana el I Congreso Internacional sobre el mercado de productos y servicios certificados conforme a la norma islámica, Madrid prepara para el próximo mes de octubre la primera Expohalal Spain 2015, que pretende ser un "punto de encuentro entre proveedores y compradores".En este contexto, Córdoba aspira a convertirse en centro europeo del intercambio comercial de productos y servicios entre Oriente y Occidente. Así se ha puesto de manifiesto en el I Congreso internacional celebrado en la ciudad andaluza durante los días 24, 25 y 26 de marzo, que ha congregado en el Rectorado de la Universidad a más de 300 participantes, procedentes de 70 países. Como este medio ha venido informando, el encuentro ha suscitado un debate de gran nivel entre expertos, académicos y empresarios de grandes firmas internacionales, atraídos por la oportunidad que representa un tráfico comercial abierto a 1.600 millones de personas en el mundo, 40 de ellos con residencia habitual en Europa.
"Visibilizar la apuesta de Córdoba y España por el mundo halal era el objetivo del Congreso", que se ha logrado con nota sobresaliente, en opinión de Mariam Isabel Romero, la presidenta del Instituto Halal (en la foto de la noticia). El patrimonio monumental y cultural de Córdoba convierte a la ciudad en foco de atracción preferente para ese enorme potencial de clientes, ciudadanos de países musulmanes que tienen en Al-Andalus una referencia histórica y sentimental. ‘’Pero debemos hacer las cosas bien. No a cualquier precio. Intentando evitar errores detectados en otros países del entorno europeo’’ –precisa Romero-. "En este primer encuentro, que pretendemos que se repita, al menos cada dos años, hemos constatado que el tejido empresarial ve la oportunidad y empiezan a surgir iniciativas interesantes, aunque hay mucho camino por recorrer. Prácticamente, todo". Efectivamente, de los 65 millones de turistas que visitaron España en 2014, sólo 1,15 millones procedían de países musulmanes. Esta cifra no incluye a los inmigrantes marroquíes que anualmente cruzan la Península rumbo a su país para disfrutar de sus vacaciones estivales y, posteriormente, de regreso a los distintos países de la Unión Europea donde tienen establecida su residencia habitual el resto del año, por motivos laborales en su mayoría.
España se sitúa en la actualidad, según datos del Ministerio de Industria y Turismo, en el sexto lugar de preferencia entre los países europeos para los visitantes procedentes de Emiratos Arabes Unidos, Arabia Saudí y Malasia. En opinión de la presidenta del Instituto Halal, "España tiene en sus manos la posibilidad de multiplicar por 20 a corto plazo el número de visitantes de origen musulmán, si se hacen los esfuerzos necesarios por parte de todos los actores implicados. "Tenemos que informar y formar a los profesionales, -productores, comercializadores y, especialmente, a los del sector turístico-. Y debemos incidir en lanzar campañas de promoción específicas para atraer a ese público". Según cálculos del Instituto Halal, el mercado de productos y servicios dirigidos a los consumidores musulmanes mueve en la actualidad unos 3 billones de euros en el mundo.
De esa cifra, unos 65.000 millones se concentran en Europa y sólo 1.000 en España. El mercado halal español abastece sólo a 2 millones de personas en Europa, una cantidad ínfima en relación a la demanda real. Romero subraya, por ello, la importancia de convertir a España en una plataforma de servicios que dé respuesta a esa demanda. En esta línea, el ponente Javier Santiso, profesor de Economía de la Escuela de Negocios ESADE, afirmó en su exposición ante el pleno del Congreso que España debe actuar como radar de captación de inversiones, dado su atractivo para los fondos musulmanes. Respecto al modo de proceder, hizo referencia, entre otros datos significativos, a los ofrecidos por el sondeo de la consultora Dinar Standard, que ha cifrado en un 67% el porcentaje de turistas musulmanes que requiere restaurantes y hoteles halal. Este requisito se sitúa muy por delante de la relación calidad-precio. Sin embargo, en España sólo hay dos hoteles con esta certificación, el Alanda Marbella, y el Alhambra Palace Granada.
"En menos de 15 años, -explicó-, según las previsiones conocidas en el congreso celebrado esta semana en Córdoba, un tercio de la población joven vivirá en países musulmanes, por tanto las tasas de demanda de la productos halal experimentarán un crecimiento exponencial". El Instituto Halal, con sede en Córdoba, es el principal centro de certificación en España de productos y servicios aptos para el consumo de los musulmanes. Este mercado abarca desde galletas, bollería o productos de belleza sin grasas de cerdo, bebidas espumosas sin alcohol, inversiones financieras sin intereses o restaurantes en los que no se consume cerdo. El organismo certificador, cuenta con técnicos inspectores que revisan la cadena de producción, comercialización, exposición y venta, así como las cocinas de hoteles, restaurantes y de cualquier establecimiento donde se sirva o elabore comida para consumo por parte de población musulmana.
El Instituto, que cuenta con la colaboración de la Cámara de Comercio de Madrid, ya ha certificado 300 empresas españolas, casi todas del sector agroalimentario, que representan en torno a un 0,08% del total que se dedica a la agroalimentación en el mundo. En colaboración con este centro certificador y otras instituciones y entidades integradas en la Fundación Agrópolis, el Ayuntamiento de Córdoba desarrolla un proyecto para la creación de un Parque Empresarial dedicado a la producción halal. El estudio previo elaborado para conocer las cifras iniciales de negocio avanza que podría acoger más de 1.300 empresas y generar más de 6.000 empleos. El objetivo de la Fundación Agrópolis es convertir a Córdoba en el núcleo del referente agroalimentario nacional, para lo cual se desarrollarán distintos proyectos, entre los que figura el clúster halal, que requerirá inversiones para su puesta en marcha por encima de 20 millones de euros hasta el año 2020.
