viernes. 29.03.2024

Arabia Saudita está permitiendo que hombres y mujeres extranjeros alquilen habitaciones de hotel juntos sin demostrar que tienen relación de parentesco después de que el conservador reino musulmán lanzó un nuevo régimen de visa de turista para atraer al turismo.

A las mujeres, incluidas las saudíes, también se les permite alquilar habitaciones de hotel por sí solas, en una ruptura con las regulaciones anteriores.

Según informa la agencia de noticias Reuters, los movimientos parecen allanar el camino para que las mujeres no acompañadas viajen más fácilmente y para que los visitantes extranjeros solteros permanezcan juntos en el estado del Golfo, donde está prohibido el sexo fuera del matrimonio.

La Comisión Saudí de Turismo y Patrimonio Nacional confirmó el viernes un informe del periódico en idioma árabe Okaz, donde comentaba que, “a todos los ciudadanos saudíes se les pide que muestren identificación familiar o prueba de relación al registrarse en los hoteles. Esto no es obligatorio para los turistas extranjeros. Todas las mujeres, incluidas las saudíes, pueden reservar y alojarse en hoteles solas, proporcionando identificación en el check-in”.

Arabia Saudita abrió sus puertas la semana pasada a turistas extranjeros de 49 países mientras intenta hacer crecer ese sector y diversificar su economía lejos de las exportaciones de petróleo. Como parte del movimiento, decretó que las visitantes no necesitan usar túnicas negras que cubran todo su cuerpo, sino que deben vestirse con modestia. El alcohol sigue prohibido.

Arabia Saudita ha estado relativamente cerrada durante décadas y, hasta hace poco, hombres y mujeres no relacionados, incluidos los extranjeros, podían ser severamente castigados por mezclarse en público. Los códigos sociales estrictos se han relajado en los últimos años y el entretenimiento previamente prohibido ha empezado a emerger.

Pero una afluencia de turistas (las autoridades apuntan a 100 millones de visitas anuales para 2030) podría ampliar los límites y correr el riesgo de una reacción conservadora.

El Reino puso fin a una prohibición muy criticada sobre las mujeres que conducían el año pasado y en agosto otorgó a las mujeres nuevos derechos para viajar al extranjero, eliminando un sistema de tutela que asigna a cada mujer un pariente masculino para aprobar decisiones importantes a lo largo de sus vidas.

Los cambios son parte de la ambiciosa agenda de reforma económica y social del príncipe heredero Mohammed bin Salman. Sus planes han recibido elogios internacionales, pero su imagen se ha visto empañada por el asesinato del periodista Jamal Khashoggi, una ofensiva contra la disidencia y por una guerra devastadora en Yemen.

Hasta ahora, los extranjeros que viajan a Arabia Saudita han estado restringidos en gran medida a los trabajadores residentes y sus dependientes, viajeros de negocios y peregrinos musulmanes a quienes se les otorgan visas especiales para visitar las ciudades santas de La Meca y Medina.

Arabia Saudita permite que hombres y mujeres extranjeros compartan habitaciones de hotel
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