Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita, Bahréin y Egipto han condenado con vehemencia el informe elaborado por la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas cuyos miembros visitaron Qatar en noviembre de 2017 como engañoso, inexacto y basado en información incompleta de la crisis política entre los cuatro países y Doha y su contexto histórico.
Qatar está buscando un arbitraje internacional para acabar con el bloqueo impuesto por tres de sus vecinos del golfo y Egipto.
El cuarteto, en una declaración sobre el informe emitido por la comisión en su visita a Qatar el 24 de noviembre de 2017, afirma que la crisis se atribuye al apoyo de Qatar a personas y entidades involucradas globalmente en financiar en la región árabe el terrorismo, promover ideologías terroristas y retórica de odio a través de medios de comunicación pertenecientes directamente al Estado de Qatar o financiados por personalidades de Qatar.
La declaración señala que el boicot de los cuatro países contra Qatar es un derecho soberano para defender su seguridad nacional y surge como una reacción normal que es aún menor en su intensidad a las prácticas del gobierno de Qatar y su apoyo al terrorismo en contra de la ONU, las leyes internacionales y todas las resoluciones relevantes emitidas por el Consejo de Derechos Humanos y la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Mientras tanto, los cuatro países afirmaron que el boicot no está dirigido contra el pueblo qatarí con quien el cuarteto tiene vínculos fraternales y tribales profundamente arraigados. Los cuatro países expresaron su rechazo al contenido y los resultados del informe, que reiteraron, incluyen acusaciones infundadas y que van en contra de la razón y la verdad.
Según informa la agencia estatal de noticias de Emiratos, WAM, el informe refleja un descarado sesgo a favor de la opinión de Qatar, que se basa en falsas acusaciones realizadas por Doha.
Así mismo, los cuatro países afirmaron sus reservas sobre la forma y el momento de filtrar el informe de la Comisión Nacional de Derechos Humanos de Qatar durante una conferencia de prensa celebrada en la capital de Qatar el 8 de enero de 2018, señalando que la Comisión de la ONU no envió el informe a las misiones de los cuatro países antes de publicarlo ese mismo día.
Los informes técnicos compilados por la Comisión a solicitud de los Estados miembros buscan transferir conocimientos especializados para desarrollar el sistema de derechos humanos y abordar las violaciones de los derechos humanos en el estado en cuestión. Los cuatro países explican que las continuas políticas de Qatar carecen de credibilidad y buena fe al tratar con la ONU y sus organismos técnicos especializados internacionales.
En consecuencia, los cuatro países piden a la Comisión que aborde las inexactitudes sistemáticas y los errores de procedimiento contenidos en el informe que no se ajustan a las normas internacionales y que la naturaleza del trabajo de la misión técnica enviada a Qatar no trascienda las fronteras geográficas del estado que solicita el soporte técnico.
Los cuatro países subrayan el desprecio del gobierno de Qatar por cualquier iniciativa seria para resolver la crisis política y sus continuos intentos de engañar a la comunidad internacional con respecto a las principales causas de la crisis al dirigir acusaciones contra los cuatro países en organizaciones internacionales a pesar de los esfuerzos que está realizando Su Alteza el jeque Sabah Al Ahmed Al Jaber Al Sabah, emir de Kuwait, por mediar en la crisis. Esto confirma el hecho de que Qatar no tiene una intención verdadera y honesta a corto plazo.
