Crear conciencia sobre el problema que supone a nivel mundial el aumento de la obesidad y el sobrepeso es el tema principal sobre el que versa la 23 edición del Congreso Mundial Anual de la Federación Internacional para la Cirugía de la Obesidad y Trastornos Metabólicos, que ha tenido lugar en Dubai (Emiratos Árabes Unidos) hasta el pasado sábado.
El cirujano bariatra mexicano José Antonio Castañeda, que está participando este año en la cumbre, señaló que en este congreso se está tratando “cómo incrementar la conciencia en el paciente sobre el cuidado tras el procedimiento quirúrgico y el seguimiento posterior a la operación”.
Castañeda estuvo al frente de la operación del hombre con mayor peso del mundo en 2017, Juan Pedro Franco, con 595 kilos, en México.
Según el especialista, todos los problemas de obesidad “no se resuelven con la cirugía, sino con una dieta adecuada y un tratamiento psicológico; la cirugía es el primer paso para bajar de peso, pero está comprobado que el éxito a largo plazo depende de los seguimientos que haga el paciente, de sus hábitos”.
“Hay pacientes que después de la cirugía no vuelven a aparecer por el hospital y empiezan a comer igual que antes”, aseguró.
Asimismo dijo que “la obesidad es un problema que va en aumento a nivel mundial pero a la que el paciente no le da la importancia que tiene, por eso hay que crear conciencia, porque la cirugía por sí sola no funciona”.
El doctor mexicano dio cifras concretas, como que la federación ha comprobado que “por cada 10 kilos que tenga por encima de su peso una persona son de tres a cinco meses de vida menos”, un dato que “es una realidad y un hecho”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el sobrepeso somo un índice de masa corporal (IMC) de 25kg/m2 o más, y la obesidad, como un IMC de 30kg/m2 o más.
UN CONGRESO A NIVEL MUNDIAL
Durante el evento anual internacional, en el están participando cirujanos, pero también nutricionistas y psicólogos enfocados al seguimiento del tratamiento postoperatorio, se están abordando temas como los procedimientos en pacientes con edad avanzada, la definición de responsabilidad médica y sus límites o la reincidencia frente al éxito.
“En este congreso internacional todos estamos muy apegados a los cambios que pueda haber, hay un consenso general del tratamiento del que nadie se puede salir; todos venimos a compartir experiencias con los demás grupos y dar nuestros puntos de vista”, manifestó.
Castañeda y su equipo se ocuparán en el congreso del síntoma de la taquicardia que puede experimentar un paciente que se somete a una cirugía bariátrica y el porqué de la presencia de este signo.
A grandes rasgos, se trata de pacientes que pueden llegar a presentar síntomas de taquicardia después de una cirugía debido a problemas como la “anemia, fuga gástrica o deshidratación”, explicó el mexicano.
Según la OMS, desde 1975 la obesidad casi se ha triplicado en todo el mundo con más de 1.900 millones de adultos con sobrepeso (39%), de los cuales más de 650 millones eran obesos (13%).
En la región de Oriente Medio los niveles de obesidad y sobrepeso siguen en aumento.
EL 50% DE LA POBLACIÓN EN EMIRATOS ES OBESA O TIENE SOBREPESO
En Emiratos Árabes, según los últimos datos, el 50 por ciento de la población sufre la enfermedad y el 13,5% de la población es diabética -cifra que por su magnitud ocupa el segundo lugar del mundo y que se prevé va a aumentar al 19,3% para 2030.
“Los motivos por los que una persona es obesa o tiene sobrepeso son multifactoriales; desde genéticos, ambientales o culturales a dietéticos”, señaló el doctor, quien destacó que es un tema que se “debe tratar desde la infancia”.
Que los niños no tengan la posibilidad de ver la televisión en su cuarto, tomen un desayuno saludable en la escuela o dediquen 30 minutos al día a actividad física son algunas de las recomendaciones que los cirujanos de la federación aconsejan a los padres.
Según Castañeda, la obesidad “sí tiene solución siempre y cuando se oriente de una manera ordenada y protocolizada y basada en los estándares internacionales que vemos en este congreso anual para el tratamiento de la sociedad”.
“No evaluamos tanto el aspecto físico tras la cirugía sino la salud; si se puede respirar bien, caminar, atarse los cordones de los zapatos o si se tiene los niveles de presión estables y no se toma ningún medicamento”.
El encuentro internacional, que se está llevando a cabo hasta el 29 de septiembre por primera vez en Oriente Medio, cuenta este año con la presencia de más de 2.500 delegados y profesionales del sector de todo el mundo para analizar, discutir y crear consenso sobre cuáles son las mejores prácticas y tratamientos en la cirugía de la obesidad.
Los participantes en el congreso tienen acceso a un programa científico centrado en la más amplia gama de temas en el campo de las enfermedades crónicas relacionadas con la obesidad, a través de cursos de postgrado, simpiosios, charlas de expertos y operaciones pregrabadas.
